Si algo está claro, es que lo más importante de una cena es el menú en sí, y más durante estas fechas de multitudinarias reuniones, de disfrutar y de algún que otro exceso. Pero éste no es el único factor en el que deberíamos centrar toda nuestra atención; lo que rodea también se merece su parte.
Como en todo, la diferencia puede lograrse en los pequeños detalles, y la decoración de la mesa es uno de ellos. Lo sentimos, pero el “en mi casa no cabemos”, “¿y dónde vamos a meter ahora los platos?”, “no tengo tanta vajilla igual”… Ya no sirven, se te han acabado las excusas. Si vas a ser el anfitrión de alguna de las cenas que se aproximan en estos días de Navidad, aprovecha para sacar tu lado más creativo y sorprender a todos tus invitados con alguna de las sencillas ideas que te damos a continuación. Coge papel, boli y ¡toma nota!
Crea un centro de mesa navideño
Si cuentas con una amplia mesa, u otra supletoria en la que puedas situar los platos que más ocupen liberando más espacio en la principal, estás de suerte: tienes un sinfín de opciones para crear un precioso centro. Eso sí, todos los elementos que incluyas en el mismo deben tener una altura baja, que no impida la visión entre los comensales. ¿Nuestra propuesta? Uno estilo guirnalda que se extienda de un extremo a otro de la mesa, formado por una mezcla de velas, plantas y pequeños motivos navideños.
Ilumina la velada
Las cenas navideñas se caracterizan por un sinfín de entrantes y platos principales, que convierten la mesa en un tetrix si no cuentas con un gran espacio y quieres añadir elementos decorativos. Si éste es tu caso, optar por unas velas para dar un toque a la mesa puede ser la mejor idea. Huyendo un poco de los tradicionales candelabros, nuestra propuesta son velas grandes (siempre blancas) sobre pequeñas plataformas de madera, o en tamaño pequeño dentro de frascos de cristal con agua, como puedes ver en estas imágenes.
Un brindis más original
Si no te gustan las florituras y prefieres una decoración sencilla o simplemente algunos toques sutiles, centra tu atención en la cubertería o en la cristalería. En este caso, te proponemos decorar las copas con algún ramillete verde, con un spray de efecto nieve en la zona baja o añadiendo detalles con rotulador dorado.
Cada oveja con su pareja
Una de nuestras propuestas para estas fechas es la asignación de sitios. Esto te permitirá sentar a la gente en los puestos que más te interesen, teniendo en cuenta detalles que hagan la velada todavía más agradable, como juntar a aquellas personas que sean más afines. Tan sólo tienes que colocar un cartelito con el nombre de cada uno en el plato o en un lateral de las copas, acompañado de algún motivo navideño como una ramita de acebo o una pequeña piña. ¿Quieres ser aún más original? Sustituye el papel por hojas naturales.
Juega con las sillas
Donde caben dos, caben tres: las sillas ya no son un problema. ¿No tienes suficientes? ¡Mejor! Junta sillas de distintas formas y materiales: blancas, de madera… Colócalas de forma intercalada, sin pegar dos iguales. Para unificar la estética de la mesa, añade a cada una de ellas un toque navideño como el que te mostramos en las imágenes: una corona en tonos verdes, un ramillete de acebo…