Después de un año duro de trabajo sin descanso llega el verano y con él, las esperadas vacaciones de nuestra estación favorita. Pero después de tanto tiempo pensando en ellas, surge el primer problema ¿A dónde vamos? Existe una serie de lugares en los que tomar un respiro y desconectar de la dura rutina, ya no habrá más dolores de cabeza ni problemas.
Valdáliga (Cantabria)
Empezamos con uno de los municipios de Cantabria que cuenta con una de las mejores playas de todo el norte, la playa de Oyambre. Es el destino ideal para aquellas personas a las que les encante el surf, el fresquito y la naturaleza. Como muchas de las playas de Cantabria, Oyambre se encuentra rodeada de dunas y de naturaleza que envuelven cada rincón de su costa. Además, Valdáliga se encuentra a escasos kilómetros de otros pueblos como Comillas o San Vicente de la Barquera que se pueden visitar para pasar el día.
Tarifa (Cádiz)
Si lo que se quiere es estar tranquilo en una playa, disfrutando del sol, un buen libro y una buena paella a la hora de comer, Tarifa es el sitio ideal para pasar unos días. No solo por la buena temperatura que hace durante todo el verano, sino también por muchos de los lugares que se pueden visitar. La playa de Bolonia es uno de los sitios que más de moda está últimamente, los turistas acuden para poder observar una de las últimas playas vírgenes del sur con agua cristalina y arena fina. También, para los más curiosos y aventureros, se puede visitar el yacimiento romano de Baelo Claudia que se encuentra a unos pocos metros de la playa.
Ayllón (Segovia)
Para aquellas personas que solo busquen la paz y tranquilidad de las zonas rurales, su sitio ideal es Ayllón, un pueblo situado al noreste de Segovia declarado Conjunto Histórico-Artístico y ganador de premios como el concurso de embellecimiento de pueblos. Se podrá visitar en el municipio el palacio de los Contreras declarado monumento nacional en 1945, además de numerosos rincones como la plaza mayor que hacen que Ayllón desprenda una esencia única.
Estoril (Portugal)
A 6 kilómetros de Cascais, en la carretera camino a Sintra, nos encontramos con la costa portuguesa de Estoril. Es el mejor destino para toda la gente espontánea que lo que quiere es pasar unos días descubriendo las distintas playas que les ofrece Portugal. En concreto, la playa Do Guincho, que tiene un camping muy cerca de ella, cuenta con fuertes oleadas de viento que permite practicar deportes extremos como el Kitesurf, asimismo se pueden dar largos paseos por la orilla mientras se disfruta de la brisa marina.
Marsella (Francia)
Un viaje un poco más elaborado y sofisticado sería la visita a la maravillosa costa azul de Francia. Las playas de aguas cristalinas y de color turquesa se repiten una y otra vez allá a donde vayas. Calanque de Sormiou sería el sitio ideal al que acudir en un primer momento para disfrutar de las playas de la costa francesa. Entre acantilados y barrancos se esconde una de las mejores playas de Francia, a la que se puede acceder en coche. Es el lugar perfecto para poder practicar snorkel y poder contemplar sin ningún problema todo el fondo marino de la playa.
Las cartas ya están sobre la mesa, ahora únicamente falta sentarse, elegir el destino ideal y empezar a seleccionar un alojamiento para poder pasar unas vacaciones inolvidables.
