1. No se pueden mezclar diferentes estampados
Siempre nos han dicho que mezclar estampados es una auténtica aberración. Y si lo piensas bien, ¿combina un estampado de leopardo con flores? ¡Pues sí! Mezclar patterns es una tendencia súper divertida y que puede convertir dar mucha fuerza a un look aunque las prendas no tengan un patrón muy elaborado. Un truco para combinar diferentes estampados es que los colores sean más o menos parecidos o de la misma gama, así será mucho más fácil y tendrás muchas más opciones para hacer el mix. Si quieres inspirarte, échale un vistazo al Instagram de la influencer @madamederosa.
2. Rosa y rojo no pegan, azul marino y negro tampoco
Todos hemos escuchado alguna vez la típica frase de «rosa y rojo, patada en el ojo» y lo mismo pasa con otros colores como el azul marino y el negro o el negro y el marrón. Ya es hora de romper esta regla, ya que hemos comprobado que son colores que casan muy bien. No solo por ser tonos básicos y presentes en la mayoría de nuestras prendas, si no también porque sientan genial como a @leoniehanne.
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3. Dorado y plata: nunca juntos y solo por la noche
El dorado y el plata, en sus múltiples formas (accesorios, lentejuelas, glitter, etcétera) siempre han sido dos colores exclusivos para la noche; posiblemente por su elegancia y porque «visten» muy bien. En cuanto a los accesorios y joyas, parece que era tabú mezclar estos dos materiales y lo cierto es que en ambos casos, este mito ha quedado totalmente atrás. Nos encanta la mezcla de dorado y plata y más cuando añadimos a un look una prenda llamativa en alguno de estos dos tonos, ya sea de día o de noche.
4. El bolso y los zapatos siempre tienen que ir a juego
Una de las normas de estilo básicas y que además la mayoría seguimos, es que el bolso y los zapatos tienen que ir a juego. Es una forma de cerrar el look y que esté mucho más completo y unificado. Es verdad que tiene bastante sentido y que queda muy bien, pero eso no significa que no combinarlo sea un ataque contra la moda. Nos encantan las combinaciones arriesgadas y más en los accesorios y el calzado, ya que son dos puntos clave de un buen estilismo. Mira que bien lo hace @emilisindlev:
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5. Eres bajita, eso no te queda bien
Todas las personas que somos bajitas hemos sentido y nos han inculcado que por nuestra estatura hay determinadas prendas que no nos podemos poner. Pantalones baggy, vestidos largos, culottes, botas de caña alta o ropa oversize son algunos de los ejemplos de lo que nos prohíbe la moda. La verdad es que es un mito absurdo ya que para crear y seguir tu propio estilo da igual tu altura, peso o edad. Si tu te ves bien y te sientes bien, ¡adelante! Nadie conoce tu cuerpo mejor que tú
6. El traje de chaqueta es aburrido
El traje de chaqueta y pantalón ha sido una pieza que poco ha variado a lo largo de los años. Manga larga y pantalón largo de corte recto, estructura en los hombros, solapas en la americana y colores que iban variando entre negro, gris y azul marino dependiendo de la ocasión. Cuando el traje pasó al armario femenino, el pantalón se convirtió en falda lápiz y no fue hasta años después cuando decidimos que queríamos adoptar el look masculino. Es un buen ejemplo de elegancia y soluciona cualquier estilismo pero es verdad que hasta hace unas temporadas se había quedado anticuado. Ahora todo es diferente y podemos encontrar trajes de todo tipo de colores y con todo tipo de patrones, desde blazer oversize como el de Anna Carla (@annacarlaesimona) combinadas con bermudas a americanas de corte torero con pantalón de pata de elefante.
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Se libre, atrévete y crea tu estilo como más te guste.