Riccardo Tisci, diseñador de Givenchy, creó un laberinto de madera que recordaba a los de las antiguas pirámides para presentar su colección en la París Fashion Week.
El diseñador dijo, cuando celebraba diez años al frente de Givenchy, que era el momento de un nuevo período y ha querido viajar a la antigüedad para «volver a empezar» .
Vestidos, prendas sastre y tops, entre los que destaca un top plateado que hemos visto combinado de diferentes formas sobre la pasarela, conforman esta colección que mantiene la esencia del diseñador en la que ha utilizado símbolos egipcios, cómo ojo de horus, formas psicodélicas, y temática militar para estampar sus prendas de forma digital.
Otra de las grandes citas de la París Fashion Week era el desfile de Dior, que sigue estando en el punto de mira debido a la reciente llegada de Serge Ruffieux y Lucie Meier al frente del equipo creativo.
Con una colección inspirada en el Barroco y el Gótico Ruffieux y Meier crearon una gran cantidad de prendas negras que dieron el pistoletazo de salida al desfile para dejar paso a prendas más coloridas y con estampados de flores y pasley.
Chaquetas reversibles con maxisolapa, cuellos tortuga, faldas midi menos rígidas, mangas abullonadas y volantes son las señas de identidad de esta colección que no ha sido aclamada por el público pero si ha recibido buenas críticas, lo que le confirma a la firma que su apuesta ha sido correcta y que deben continuar trabajando para afianzar esta nueva identidad.
