Hoy en día, parece que muchas personas desconocen todos los enemigos a los que el cabello se enfrenta cada verano además del sol. Por ello, con la ayuda de la experta en tratamiento de Yves Rocher, Begoña Gómez, vamos a detallarlos y explicar cómo combatirlos.
Nos apasiona ponernos bajo el sol, pero este viene acompañado por la radiación UV que es la responsable de deshidratar el cabello dejándolo más frágil y provoca un apagado general del tono. Por consiguiente, el calor hierve el pelo y aumenta su porosidad para fragilizarlo aún más.
Por otro lado, factores externos como el viento lo enreda a diario más de la cuenta y provoca que se pierdan más cabellos de los estrictamente permitidos a la hora de peinarlo. Asimismo, se daña cuando te recoges el pelo mojado, te vas a dormir con el cuero cabelludo aún húmedo o sumas un excesivo número de pasadas con la plancha para controlar el encrespado propio de la costa.
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Finalmente, el yodo debilita las fibras de queratina y provoca daños en la cutícula, puntas abiertas, pérdida de elasticidad y mayor riesgo de rotura; y el cloro no solo hace que el tono se ponga verde, sino que roba las grasas naturales protectoras del pelo y hace que se muestre seco, áspero y quebradizo.
Ante estos problemas, Gómez recomienda varios productos estrella de su firma que no sobrepasan los 10 euros: el Champú Sólido Nutrición con aceites infusionados, el Aceite Botánico que nutre intensamente, el Bálsamo Botánico Rich que aporta flexibilidad sin siliconas o la Mascarilla Reparadora para Puntas enriquecida con aceite de jojoba orgánico. Todos ellos funcionan como tratamiento en profundidad con un uso continuado, además del uso específico para el que fueron creados y varios tienen la opción de utilizarlo tanto en cabello seco como húmedo.