Enrique Ponce y Ana Soria son una de las parejas más mediáticas y polémicas del panorama nacional. Su relación salió a la luz en 2020, cuando el torero anunció su separación de Paloma Cuevas tras 24 años de matrimonio. Desde entonces, los medios de comunicación han seguido con lupa cada paso de la pareja, que ha tenido que hacer frente a las críticas, los rumores y las presiones.
Por eso, su visita a ‘El Hormiguero‘ el pasado 23 de mayo fue todo un acontecimiento. Se trataba de la primera entrevista conjunta que concedían en televisión, y muchos espectadores estaban expectantes por conocer los detalles de su historia de amor, sus planes de futuro y su opinión sobre la repercusión mediática de su noviazgo.
https://www.instagram.com/p/CsmZomALCCj/
La pareja se mostró muy cómplice y enamorada durante toda la charla con Pablo Motos, que les preguntó sobre cómo se conocieron, cómo vivieron aquellas primeras citas y cómo afrontan las críticas y los comentarios negativos. Enrique y Ana no se cortaron a la hora de hablar de su diferencia de edad (ella tiene 24 años y él 51), de su pasión por los toros y de su deseo de formar una familia.
Además, el programa les preparó varias sorpresas, como un experimento con fuego, una actuación musical y un juego con las hormigas Trancas y Barrancas. La pareja se divirtió y demostró tener mucho sentido del humor, aunque también hubo momentos emotivos y sinceros.
https://www.instagram.com/p/CDTwVQCJ6s3/?hl=es
Pero no todo fueron halagos para los invitados. Algunos espectadores criticaron en las redes sociales la actitud del torero, al que acusaron de mentir sobre la fecha real en la que se fijó en Ana Soria. Según él, fue en agosto de 2020, cuando ella estaba en el tendido de la plaza de toros de Almería. Sin embargo, algunos medios apuntan a que el flechazo se produjo antes.
En definitiva, la visita de Enrique Ponce y Ana Soria a ‘El Hormiguero‘ fue un programa interesante para los amantes del corazón, que pudieron conocer más a fondo a una pareja que no deja indiferente a nadie. También fue una oportunidad para ver otra faceta del torero, que dejó claro que está dispuesto a dejar atrás su carrera profesional por amor.