En las estaciones de primavera, verano e incluso otoño, es cuando se produce la mayor demanda de este tipo de polvos, para aparentar un baño de rayos de sol. Pero entonces, ¿solo se usan durante unos meses? ¡NO! ¡Se pueden utilizar todo el año!
La capacidad del ‘bronzing powder’ o la técnica del ‘contouring’, son la clave de sus múltiples usos. El famoso ‘contouring’ se puede realizar con productos en polvos MATES. Todo lo que marquemos con bronceador será para obtener profundidad o hundir. Así que, veamos como prolongar su uso de cara al invierno.
Para conseguir un efecto ‘buena cara’
Para una tez besada por el sol, debemos aplicar toques sutiles de bronceador en las mejillas y, con suavidad, un toque en frente y barbilla para conseguir un tono homogéneo en el rostro. Es importante no poner mucha cantidad; no es natural un rostro saturado de bronceador.
Para marcar pómulos
En este caso, estamos hablando del concepto ‘contouring’ en todo su esplendor. Para aquellas zonas del rostro que queremos hundir, debemos sombrear debajo del hueso del pómulo, creando una zona sutilmente oscura y así enmarcar los huesos o puntos a destacar.
Para acortar un rostro alargado
Las zonas que debemos oscurecer para acortar siempre están en los extremos. Por eso, ponemos un toque de bronceador en la frente, justo en la base del cuero cabelludo. Y después, en la barbilla. Difuminamos bajo el mentón en dirección al cuello.
Para afinar la nariz
Partiendo otra vez de la regla básica, para afinar la nariz aplicamos el producto en los laterales, en una línea recta, consiguiendo atenuar la zona y un efecto visual de corte o reducción.
Para dar profundidad a la mirada
Para un look natural, podemos dar un toque tostado a los ojos. Aplicamos una pre-base de ojos en el párpado móvil para una mejor fijación y después, aplicaremos los polvos bronceadores marcando la cuenca del ojo o banana para dar más profundidad.
Para matificar un labial
El acabado mate es tendencia, pero si no tienes un labial mate a mano, aquí tienes la solución. Para dar un acabado aterciopelado, podemos matificarlo con toques muy sutiles de bronceador con la ayuda de un pincel.
Déjanos en los comentarios cómo utilizas tu bronceador, y cómo sacas el máximo partido a tu rostro.