Ana Locking es una amante de la cultura norteamericana desde hace mucho años y Preachers and Believers
Ana Locking no quiso andarse con rodeos e instaló un gran busto de Donald Trump sobre la pasarela, así, los más despistados tendrían totalmente clara la idea sobre la que gira Preachers and Believers. Prendas de azules intensos y oro con silueta bien estructurada acompañadas de camisas blancas representan a los Preachers y las prendas en tonos pastel representan a los Believers.
Es una colección muy trabajada y que utiliza los dobles sentidos para expresar la imagen que la diseñadora tenía en su cabeza mientas la diseñaba. «Observa como muchos de los políticos recurren a la clásica camisa blanca, es porque simboliza la credibilidad, la confianza» explicó Ana Locking.
Vestidos túnica con cascadas de paillettes XL en la espalda, transparencias de organza, vestidos – enagua, vestidos nice, trajes de baño que recuerdan más a niñas que a mujeres, una chaqueta dorada en jacquard, un vestido palabra de honor de paillettes rosa chicle, otro de guipur, gorras de béisbol, gafas XXL, gorros de vaquero, pañuelos a la cabeza, etc. Una mezcla explosiva y maravillosa que despierta nuestros sentidos y nos transporta un poco al antiguo western, pasando por el instituto para terminar en los grandes despachos de los que partíamos con el gran busto de Donald Trump.