Seguro que muchas de vosotras habéis pensado alguna vez lo que bien quedaría ese outfit que utilizasteis cuando salisteis de fiesta con los amigos el fin de semana, para ir a trabajar a la oficina. Pero, siempre surgen dudas que no nos dejan lanzarnos y lucir esas prendas, al considerar que no nos quedarían bien o que, todo el mundo nos miraría.
Ya es hora de ser valientes y atrevernos a innovar. El truco es elegir el vestido adecuado que pueda hacer la función de traje de oficina y look de fiesta a la vez, con el que nos sentamos cómodas y que puedan extender su encanto fuera de los confines del fin de semana. Desde Hoy Magazine, os traemos algunas ideas para ayudaros a encontrar el outfit perfecto con el que deslumbrar a tus compañeros de trabajo.
Vestido negro con unos zapatos diferentes
Un vestido negro siempre es una buena idea, pero uno de largo al tobillo es incluso mejor. Si, además, lo combinas con una de las tendencias de este otoño, la americana de cuadros, conseguirás un look diferente y único. La clave para hacerlo intercambiable entre los días de la semana son los zapatos planos o de tacón medio, así como bolsos que eviten el tamaño mínimo.
El plisado y multicolor
Tanto el color como las líneas tienen una importancia capital, ya que de ser más ajustado, más largo o más corto, el encaje en tu puesto de trabajo resultaría más complicado. Por eso el plisado se puede convertir en tu mejor aliado, un estilo que triunfa tanto en el pub de moda como en tu oficina. Además, si te atreves con un vestido multicolor el resultado será más impactante. Eso sí, el bolso, mejor tendente al estilo working.
Estilo boho
El estilo boho se ha convertido en el look más imitado este verano, ideal tanto para quedar con las amigos, como para ir a trabajar. Dependiendo de la época del año, puedes decidirte por el vestido palabra de honor, media manga o manga larga, o incluso combinarlo con una biker o cazadora vaquera para darle un toque más casual. Elige un calzado cómodo y acorde a las circunstancias.
El satinado con botines y riñonera
El brillo de la tela, como sucede con los slip dresses, hablan un lenguaje de sofisticacón nocturno que, de entrada, parece tener difícil transformación… Hasta que llegan unos sencillos botines negros y una riñonera a la cintura para cambiar radicalmente ese prejuicio.
Blazer con botas altas
Puede, que para salir de fiesta la usaras sin nada debajo, pero para ir a la oficina lo mejor es incluir algo bajo la pieza principal como una blusa o un jersey de cuello alto. Si te animas a completar tu outfit con una botas altas le darás ese toque chic que tanto gusta para salir el fin de semana, como para ir a trabajar. Tanto en un caso como en otro se aconseja no abusar del tacón.