De “Lo Malo”, ¡Lo Peor!, el ritmo pegadizo que se ha convertido en el próximo éxito del verano, protagonizado por Aitana y Ana Guerra, las dos exparticipantes finalistas de OT 2017.
La canción tomada como nuevo himno social feminista, compuesta por Will Sims y Jess Morgan y adaptada al castellano por Brisa Fenoy, sin lugar a duda fue un éxito desde su lanzamiento, el tema se convirtió en un éxito llegando al n.º1 de Spotify en España, Top 6 Spotify Mundial y n.º1 en iTunes, definitivamente un ritmo pegadizo y refrescante que ha sonado por todos lados, ganando el Disco De Oro Digital en su primera semana, así como un disco de platino.
Sin embargo, otro gallo cantó con el video clip dirigido por Gus Carballo, y es que, aunque la canción invitaba a cualquiera a bailar, lo que se esperaba de las artistas en cuanto a estilismos, dejo mucho que desear.
El video que en la actualidad tiene casi 4 millones de visualizaciones, estuvo lleno de distintos estilos encarnados en las cantantes, luces, coreografía intentaba recrear un ambiente sexy y con mucho glamour, sin embargo, parecer que aveces los intentos no lo son todo.
Dada la larga espera a la que los fans expectantes se sometieron, las expectativas eran muy altas, nada había levantado tanta expectación como el lanzamiento del videoclip oficial de «Lo Malo” que ardía en las redes sociales.
Ahora, hablemos de lo que realmente nos interesa, la moda, analicemos el estilismo desastroso de cada una de las cantantes.
Empezamos por el vestido perteneciente a otro siglo, desfavorecedor a más no poder, en palabras de la propia Ana: “A ver si me lo dejan llevar como pijama.”, y aunque el traje no es lo malo ya que en una obra teatral u otro tipo de espectáculo hubiese quedado genial, elegirlo para esta ocasión no fue lo más acertado, el vestido desproporcionado con mangas amplias, además del look despeinado “peinado” que llevaba, daban a la artista un aspecto de desequilibrio, que sinceramente Ana no se merecía.
Luego vimos a Aitana con una capa que solo dejaba a la vista su rostro, más parecida a una carpa de circo en medio de una habitación, la capa con un borde de tul fruncido y supuestas “mariposas” que bien parecían trozos mal cosidos, en resumen, una carpa comiendo chuches.
¡Gracias a Dior! las cosas mejoraron algo en el momento de más euforia de la canción, por decir algo, no se arriesgaron mucho, pero se veían favorecidas, aunque no lo suficientemente espectaculares como para el lanzamiento y la expectativa tan grande que había
Un contraste el vestuario, originado por corsés, encaje, vestidos, en color negro a los que se añadieron flecos, tachuelas y pedrería, que hacían el intento de hacer parecer más especiales los looks. para así encajar con el entorno urbano que las rodeaba.
Me atrevería a decir que los bailarines estuvieron mejor vestidos y producidos que las propias protagonistas, un “Voy de mala pero no llego a tanto”.
¿Qué opináis vosotros del estilismo? ¿Creéis que dada la buena percha de las cantantes, no podían haber ido mejor?