Poco a poco, el mes de diciembre se va acercando y, con él, los paseos bajo el alumbrado navideño, las tardes de chocolate caliente mientras se decora la casa, la búsqueda de los regalos del amigo invisible y un no parar de eventos. Sí, también las (temidas) cenas de empresa.
Estas fechas son las perfectas para disfrutar de un momento con los compañeros en un ambiente más relajado, dejando a un lado cualquier tema que tenga que ver con los negocios. Pero, aunque pinte bien, es más que probable que, para muchos, éste no se trate del plan ideal. Casi por encima de la incomodidad que puede suponer codearse con los jefes de una manera más informal y el peligro que supone en esos casos la barra libre, existe una problemática que se repite año tras año, sin excepción. Ésta es el clásico “¿Y ahora qué me pongo?”.
Este tipo de eventos generan numerosas dudas con respecto al código de vestimenta a seguir, debiendo tener muy en cuenta el rango de elegancia que requiere dicha cena, lo cual suele ser difícil de acertar al no haber nada escrito, y más si lo vives por primera vez. Estamos seguros de que te sonará el hecho de pasar horas delante del armario tratando de encontrar ese “maldito vestido” que no sea ni demasiado informal, ni demasiado arreglado; que dé en el clavo.
Que no cunda el pánico. Hoy te damos algunas ideas que puedan servirte de inspiración, y así dejes zanjado este asunto lo antes posible y salgas totalmente airosa cuando llegue el momento. Para ello, nos hemos fijado en nuestro ejemplo perfecto de elegancia: Olivia Palermo.
Menos es más – Total look en blanco
Sin duda alguna, si existe una frase que defina cómo deber ser tu vestimenta para una cena de este tipo, esa es “Menos es más”. No se trata de una reunión de trabajo, pero hay que recordar que tu jefe va a estar allí igualmente. Un total look en color blanco, especialmente si éste está compuesto por un traje, se trata de una apuesta segura para destacar, pero sin caer en el exceso.
Esmoquin negro
No se trata de la mejor ocasión para ir lo sexy que probablemente te apetezca ir en algún otro de los eventos que tenemos por delante, pero nada te impide encontrar un detalle que te sitúe en un punto medio. Un conjunto compuesto por chaqueta y pantalón de esmoquin + tacones puede ser una buena opción si quieres conseguir esto, manteniendo al mismo tiempo la sofisticación y permitiéndote jugar muchísimo más con los complementos.
Falda midi con abertura + jersey
Una de las prendas con las que más puedes acertar en este tipo de cenas es una falda midi. Y con abertura, mejor. Pero hay que tener cuidado con la parte de arriba con la que la vas a combinar. Una blusa de manga larga puede hacerlo muy look de oficina. Por el contrario, un body o cualquier pieza de tirantes pueden llevarla a un terreno demasiado informal. Una buena opción es un jersey fino que, a poder ser, cuente con apliques o algún detalle especial.
Blazer oversize
Si quieres huir del clásico vestido y buscar algo más original sin llegar a nada excéntrico poco recomendado para estas ocasiones, opta por un blazer oversize. Eso sí, si además estás pensando añadir algún complemento o accesorio atrevido, te recomendamos alejarte de los estampados y elegir uno liso en algún tono neutro como el de Olivia.
Detalle brillante
Se acercan las fechas por excelencia del brilli brilli y, aunque te sientas muy tentada, es mejor que todo tejido brillante lo reserves para otras cenas de Navidad o para Nochevieja. Pero, si crees que no vas a ser capaz, añade un toque como una blazer o chaqueta de lentejuelas a un look sencillo, preferiblemente monocolor o con tonos neutros y lisos. También puedes añadirlo con un clutch o con los accesorios.