Se conocieron por un amigo en común. Estuvieron meses chateando. Y en mayo de 2017, en la Gala MET, surgió el amor. Poco más de un año después, Priyanka Chopra y Nick Jonas se han ido consolidando como una de las parejas más sólidas del universo vip. Y ahora, con sus dos clanes como testigos, han oficializado su relación en una boda-fusión que ya está arrasando en las redes sociales.
Y es que, esta relación parece sacada del libro «Las mil y una noches». Él un exitoso cantante con una legión de fans y ella una impresionante Miss Mundo, convertida en todo un ídolo en su país y fuera de él. Su paso por el certamen hizo que Priyanka desarrollara un sentido de la moda impecable que la llevó a convertirse en el rostro de las marcas más prestigiosas del mundo, a la par de su trabajo como actriz, en su país es considerada un icono de moda y poco a poco logró ganarse un estatus en el mundo occidental, donde además pudo actuar en inglés.
Para su boda y las diferentes actividades para celebrarla, escogió dos vestidos típicos de la cultura hindú. El primero, para la ceremonia religiosa, escogió un largo vestido amarillo con un hermoso estampado. Por su parte, para la celebración, escogió un vestido blanco nácar, con la capa tradicional con el que además logró bailar en el escenario, en una especie de competencia al mejor estilo de Bollywood, donde participó Nick Jonas con su familia.
Al tratarse de una cuestión multicultural, la feliz pareja se casó primero por la ceremonia cristiana. También fue en la India, pero en este caso en el lujoso hotel Umaid Bhawan Palace. El encargado de oficiarla fue el padre de él, Paul Kevin Jonas, que estuvo acompañado por el resto de hermanos Jonas (Kevin, Joe y Frankie), sus parejas (entre las que estaba Sophie Turner, más conocida como Sansa Stark) y la madre y la prima cantante de Priyanka, Parineeti Chopra.
Una ceremonia a la altura de sus protagonistas y que seguirá dando mucho que hablar. Desde Hoy Magazine, solo nos queda seguir la tradición y desearles que «sean felices y coman muchas perdices».