Fue el propio Giorgio Armani quien pronunció la frase «los japoneses son más Armani que Armani» y lo cierto es que el éxito del diseñador en el país lo refuta. Por eso mismo, este año la firma ha decidido presentar en la capital del país nipón su colección Resort 2020.
En 2007, se inauguró la Torre Armani/Ginza. La fachada de cristal e interiores de mármol fueron diseñados por los italianos Massimiliano y Doriana Fuksas. Tras las reformas llevadas acabo en conjunto con la ampliación de la Armani Casa el año pasado, la edificación se reabrió el jueves con un cóctel de recepción y una cena en el renovado restaurante de la azotea. Para celebrar la reapertura, Armani decidió presentar su colección Resort 2020.
Lo cierto es que la nueva colección no ha presentado grandes sorpresas, en la línea habitual del italiano. Un desfile que ha girado en torno a la sastrería relajada y fluida junto a looks con un cierto aire de trasnoche.
Una vez más, los colores claves han sido los grises perla, beige, azules y rojos, como ya nos tiene acostumbrados. La noche se llenó de prendas de largo, delicadas y destinadas para la alfombra roja.
La colección masculina sigue también la linea habitual, aunque esta vez con un toque más deportivo. Chaquetas causales de punto y abrigos combinados con trajes elegantes. El material estrella, el cuero, introducido de una manera suave en conjunto con el terciopelo y la seda.