Dicen que lo mejor es para el final. Y puede que no sea el único, pero Duarte ha sido el encargado de clausurar la 70a edición de la pasarela madrileña.
Y lo ha hecho con una colección precisa, de estructuras limpias y patrones de sastrería impecables.
La inspiración nace en la idea de los indios y vaqueros. Esto mismo se ve reflejado en las tonalidades marrones, la estampación print y tie dye, y el denim. Nuestras prendas son inteligentes. Si a una persona le gusta la moda, le gustará el arte. Está todo relacionado; nos cuenta el diseñador.
En la nueva colección de Duarte se puede apreciar un contraste entre tejidos fluidos y formas más estructuradas. Sin embargo, todas ellas guardan cierto punto de atemporalidad, un factor que ha sido detonate en las colecciones de muchos artesanos. No pensamos en la atemporalidad como un factor detonante a la hora de crear una nueva colección, pero muchas de nuestras prendas lo son.
En la paleta cromática priman tonalidades blancas y crudos, pero con ápices de color que se manifiestan en marrones, naranjas chillones, azules desgastados y verdes botella.
Todas las prendas guardan cierto punto de atemporalidad, un factor que ha sido detonate en las colecciones de muchos artesanos
Los modelos se deslizan con gracia sobre el parquet. No sin antes sorprendernos con su sombra tras la lona. El juego de luces y claroscuros con el que inicia y finaliza la pasarela nos recuerda a las pelis de indios y vaqueros, donde cualquier simple movimiento ya era un detalle que no te debías perder (porque podía salvarte la vida).
Duarte es una firma que nace hace tres años como un proyecto de moda para hombre y sastrería. Hace un año decidieron introducir un 30%, aproximadamente, de moda para mujer. Es por eso que el target de la casa se encuentra en público al que le gusta la moda, que está culturizado y que le gusta el arte.
Y con esta colección, la casa pretende demostrar que la moda es algo más que simples productos, que forma parte de nuestra vida y que las inspiraciones navegan donde menos te lo esperes.
Una colección exquisita, limpia y bien depurada que resulta un deleite para el buen gusto minimalista
En definitiva, una colección exquisita, limpia y bien depurada que resulta un deleite para el buen gusto minimalista. Al fin y al cabo, bien está lo que bien acaba.