El Black Friday o Viernes Negro es el día en que se inauguran oficialmente las compras navideñas en Estados Unidos. Celebrado un día después de la conocida fiesta de Acción de Gracias, este evento llega importado a España para reducir los precios de muchos productos, especialmente de prendas de ropa y tecnología.
Cuentan algunas leyendas americanas, que recibe el nombre de “negro” ante el intento de los comercios de cambiar los números rojos de sus negocios. Otros sin embargo, sitúan el origen de este evento, ahora también europeo, en 1975 cuando The New York Times utilizó por primera vez este concepto para referirse al caos en que se había vista inmersa la ciudad neoyorquina con los descuentos que miles de tiendas habían puesto el día después de Acción de Gracias. Fuera como fuese, este viernes 27 de Noviembre múltiples tiendas en España acogen esta iniciativa poniendo ofreciendo muchos de sus productos a partir del 10%. Así que no podemos hacer otra cosa que dar las gracias a la compañía Apple que fue la encargada de importar esta tradición estadounidense hace ya cinco años.
Seas un experto en la búsqueda de gangas o no, las rebajas y los descuentos siempre alegran a cualquiera pero no siempre son buenas noticias. Y no porque se llame Viernes Negro, sino porque como otras tantas cosas, es un arma de doble filo: largas colas se despliegan ante los ojos de compradores y vendedores provocando lentitud; el caos y el desorden de apodera de las tiendas y el agobio se convierte en uno de los grandes protagonistas. Las precauciones básicas que se deben tomar son las mismas que las de cualquier otro tipo de rebajas.
- Quizás ha llegado la hora de que te preguntes qué es lo que realmente te resultaría necesario, escríbelo y crea una ingeniosa lista de prioridades. Aprovecha para darte algún que otro capricho y sobre todo, piensa que es el momento para hacerte con todos los regalos de Navidad.
- Revisa los catálogos de tus firmas favoritas. Tenemos Internet así que… ¿por qué no hacer uso de él para ahorrarnos tiempo? Y recuerda, ¡agarra bien fuerte aquello que más desees antes de que te quedes sin nada!
- No vas a encontrar gangas y grandes ofertas en todas partes pues en lugar de poner descuentos generales, muchas marcas recurren al marketing colocando descomunales descuentos a productos muy concretos para atraer a los posibles compradores.
- Organízate, planifica tu ruta y recuerda que solo dispones de un día por lo que no dispondrás de tiempo suficiente para hacer varias rondas. ¡Ah! Y recuerda una cosa: disfruta. Al fin y al cabo, una compra no es tan buena si no llegas con una gran sonrisa a casa.