El martes 9 de junio pasará a la historia como un día triste para la música y la cultura española. Se apagó la voz de uno de los grupos que, sin duda, ha sido banda sonora de la vida de las últimas generaciones. Pau Donés, vocalista, guitarrista y compositor del grupo Jarabe de Palo, falleció a los 53 años a causa de un cáncer de colon que padecía desde 2015. Desde el momento en el que anunció su enfermedad, el cantante dejó también patente su intención: los médicos no le auguraban mucho tiempo, por eso optó por exprimir la vida al máximo, sumando a su legado esta lección de ganas de vivir.
La enfermedad de Pau nunca fue ningún secreto, él mismo decidió anunciar que padecía cáncer. Su fallecimiento, aunque no pilló de sorpresa, no deja de ser un duro golpe para compañeros de profesión, para amigos y para todas aquellas personas que, sin conocerle, sabíamos del carisma especial de Pau gracias a su gran legado, sus canciones. Las redes sociales se llenaron ayer de mensajes de despedida, se inundaron de un cariño amargo que evidenciaba la admiración y el respeto por el cantante como artista y como persona. Algunos de los que tuvieron la suerte de tratar con él en algún momento destacan la grandeza de su ser y la huella imborrable que ha dejado en toda una generación.
Viviste, como el que sabe,
de espaldas a los halagos,
bebiendo de un solo trago
todo el frasco de jarabe! #adiósPauDonés
(Querido hermano, compañero de tantas y tantas. Te adoro. Te echaré tanto de menos…!) pic.twitter.com/nK6nk7jHVy— Jorge Drexler (@drexlerjorge) June 9, 2020
Aunque en 2019 anunció su retirada de la música, antes de morir Pau Donés tenía claro que quería cumplir otro objetivo: ver acabado el que sería su último disco. Así, en abril de 2020 reaparece con la canción ‘Vuelvo’, y el 23 de mayo del mismo año ve la luz del videoclip de ‘Eso que tú me das’. Ambas canciones forman parte de este objetivo que consiguió cumplir el 26 de mayo de 2020, apenas 15 días antes de su muerte, cuando se publicó el último álbum de Jarabe de Palo con su fundador y vocalista, Tragas o escupes.
Su andadura en el mundo de la música la inició con 15 años junto a su hermano Marc, con quien fundó un par de grupos antes de aterrizar en Jarabe de Palo en 1996. Temas como ‘Bonito’, ‘Depende’, ‘El lado oscuro’, ‘Agua’ o ‘Grita’ forman parte de su aclamado repertorio, llegando a considerarse uno de los grandes grupos del pop-rock español que, sin lugar a duda, ha sido, es y será siendo parte de la vida de muchas personas. Su lírica magistral que denota los dotes de poeta de su autor, así como su sonido único han pujado fuerte para hacerse un hueco en lo más alto del panorama musical de este país, alcanzando con creces este objetivo y llevándose, a su vez, el cariño y el honor de ser parte de la memoria colectiva de la cultura pop musical.
El éxito de Jarabe de Palo se lo debe, especialmente, a una canción que le hizo alcanzar la fama universal. Más que una canción, la culpable de su éxito tiene “100 libras de piel y hueso, 40 kilos de salsa y en la cara dos soles que sin palabras hablan”. ‘La flaca’ y una campaña de publicidad consiguieron que el nombre de Jarabe de Palo resonase más allá de las fronteras. Años más tarde, ‘La flaca’ sigue perpetuando su universalidad, es patrimonio de noches de fiesta y mañanas de resacas, es una parte fundamental de la banda sonora de una historia aún en construcción.
Queda huérfana la flaca, ensombrece la cara mala de la vida y sabemos como nunca lo difícil de la mezcla de agua y sed. Pero aunque la pérdida duela y el dolor resulte irreparable, dicen que solo muere quien es olvidado, y el cáncer no ha podido quitarle a Pau Donés lo que hacía tiempo que ya había conseguido: la eternidad en forma de canciones y versos, en forma de el cariño que le profesan quienes tuvieron la suerte de cruzarse con él y quienes tenemos la suerte de recordarle en su obra. Porque, si algo nos ha enseñado su forma de afrontar la vida, es que, según como se mire, todo puede parecer bonito.