Hace unos días tuvieron lugar los premios SAG, premios cinematográficos anuales otorgados por el Sindicato de Actores de Estados Unidos, que premian las principales interpretaciones realizadas por sus miembros.
Es uno de los principales eventos cinematográficos del año en Hollywood pero, para que mentir, en este tipo de galas la alfombra roja es casi más importante que los premios. Cada año se repite el ritual, las actrices (y algunos actores) se esfuerzan para ser los mejor vestidos sobre la alfombra pero siempre hay excepciones y ahí es donde estamos nosotros recordándoles que no se han esforzado suficiente.
Vamos a empezar por Brie Larson, con la cantidad de vestidos que le habrán propuesto para asistir a la gala, ¿de verdad tenemos que pensar que este era el más bonito?. Aunque podríamos pasar por alto que el vestido es soso, esas anillas y cordones para unir partes del vestido son imperdonables y ese escote, por llamarlo de alguna manera, que parece que una parte ha quedado un poco floja y se le va a escapar un pecho en cualquier momento también.
La tercera en esta lista infernal es January Jones. Después de darle muchas vueltas hemos llegado a la conclusión de que no es un vestido sino un gran trozo de gasa enrollado en su cuerpo. Seguramente habrá sido un trabajo complicado pero ya puestos podrían haberse esforzado un poco más y crear un vestido que nos dejará a todos con la boca abierta y estaríamos hablando de él durante meses.
Es el turno de Laverne Cox. En esta ocasión, si bien el vestido no es el más maravilloso de la alfombra roja, tampoco es de los que entran en esta lista de cabeza. Salvando el detalle del corte en la parte delantera, que no tiene ningún sentido, o el hecho de que debería tener más tela también en esa parte la culpable de que lo incluyamos en esta lista es la propia Laverne. Os traemos dos fotos para que podáis comprobarlo por vosotros mismos, en la de la izquierda ella posa maravillosamente y el vestido parece precioso pero en la de la derecha con esa pose que intenta ser sensual lo convierte en un vestido vulgar. En ocasiones no sólo el vestido es importante sino también la forma de llevarlo.
Y para rematar Lori Petty, no hay palabras para describir semejante ‘engendro’. Si cerramos los ojos y alguien nos dice que lleva un conjunto rosa formado por un pantalón de talle alto y pata de elefante y top crop seguramente en nuestra cabeza nos imaginamos un look maravilloso lo malo será cuando los abramos y descubramos todas esas cintas y lo horrible que es el estilismo al completo. Salir así de casa debería estar penado por ley.
Y hasta aquí, la última alfombra roja, crucemos los dedos para que en la próxima nuestros ojos no tengan que sufrir tanto.