After: En mil pedazos es la segunda entrega de la saga juvenil, After, dirigida por Roger Kumble. Se trata de la adaptación de la fan-fiction creada por Anna Todd a través de la plataforma Wattpad desde 2013. Su éxito fue tan grande que una editorial le ofreció publicar su historia en papel. Consiguiendo millones de lectores, nuevos fans e incluso la adaptación en el cine.
El 12 de abril de 2019 se estrenó la primera parte de la saga y hoy, 4 de septiembre, After: En mil pedazos llega a nuestros cines. Dejando atrás los problemas que Tessa Young (Josephine Langford) y Hardin Scott (Hero Fiennes – Tiffin) tuvieron al principio, tienen que aprender a vivir el uno sin el otro, o al menos intentarlo. La joven estadounidense y el británico parecían ser almas gemelas, como las palabras que siempre usaba Hardin para resumir su relación.
«Sea cual fuere la sustancia de que están hechas las almas, la suya y la mía son idénticas.»
Tras varias promesas y compromisos, que todos saben que no van a cumplir, pretenden llevan una relación adulta y madura. Sin celos, peleas y sobretodo toxicidad, algo que está muy presente del principio al fin. La ira y la rabia de Hardin son sus dos puntos más débiles junto al alcoholismo que sufre. Sin embargo, Tessa está convencida de que detrás de todo ello hay una persona sensible y débil que tiene que cuidar. El noviazgo está marcado por una clara obsesión por parte de los dos que parecen no notar. Por ello, aun teniendo las peleas más desagradables que nadie se imaginaría, siempre acaban buscándose el uno al otro.
La cosa se complica cuando en la vida de Tessa aparece un nuevo personaje, Trevor (Dylan Sprouse), ya que es un viejo conocido de Hardin y al cual no soporta. Además, podemos ver las claras intenciones de este nuevo pretendiente, algo que enfurece todavía más a su amado. Todo ello desemboca en pérdida de nervios por parte de Hardin, peleas, celos sobre humanos y rupturas. Es en el momento en el que Tessa tiene que decidir si puede seguir soportándolo y perdonarlo o, por el contrario, cortar por lo sano. ¿No nos recuerda mucho a la típica relación tóxica y para nada sana? Efectivamente. Pero Trevor no es el único de los problemas que la pareja tendrá que afrontar, sus amigos y familia no se lo van a poner para nada fácil.
Podríamos destacar que se After trata de una temática romántica con muchos toques de obsesión, para nada bien vistos en una relación hoy en día. Sin embargo, engancha e incluso en ciertas escenas parece idílica. No todos los puntos más explícitos de la novela están reflejados, ya que sino estaría considerada como otro tipo de película. Pero, aún así, está presente el sexo, la seducción y el placer entre los dos personajes principales.
Este drama juvenil es un fenómeno mundial, por el cual miles de personas están esperando. Es una historia de varios ‘tira y afloja’ que termina en una reconciliación encantadora. No es buen ejemplo para las próximas generaciones porque, como estamos hablando, se trata de ficción y para nada existe una realidad así. Desde mi punto de vista, y tras leer las novelas, está muy bien adaptada, y es una buena producción juvenil. Sin embargo, solo disfrutarán las personas de este rango de edad. Los diálogos son pobres y sin sustancia, perfectos para un drama romántico.
La escenografía está cuidada, al igual que los vestuarios, y el reparto desarrolla sus personajes correctamente. La banda sonora acompaña perfectamente a cada situación y deja fluir las emociones buscadas. En general, es una buena película para ver tanto en los peores como en los mejores momentos y tiene más que un notable por mi parte.