La última jornada de la edición de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid se viene dedicando a los jóvenes talentos. Ayer fuimos testigos de la pasión y el “buen hacer” de las nuevas promesas de la moda española sobre la pasarela, como es el caso de Antonio Sicilia. Tras graduarse en diseño de moda, hizo las prácticas con Davidelfin, y posteriormente, formó parte del grupo Cortefiel diseñando para la marca Springfield. Actualmente se dedica a su propia marca de nombre homónimo y colabora también con proyectos de danza, cine y performance.
El diseñador cordobés, Antonio Sicilia, ha presentado su propuesta para otoño-invierno 2016/2017 en Samsung EGO. Su colección nace como una lucha en contra de la zona de confort, aquella en la que nos gusta quedarnos porque nos sentimos seguros, un cómodo inmovilismo del que muchas veces cuesta salir por la seguridad en la que nos introduce. Pero… ¿qué ocurre al romper con lo conocido e intentar saltar al vacío? La sensación que podríamos experimentar podría ser “vértigo”, así se llama la colección de Antonio Sicilia.
El diseñador muestra con sus creaciones que se puede sobrepasar esa sensación de vértigo ante algo nuevo y alcanzar un estado de bienestar con nosotros mismos sin importar el resultado, solo experimentar el proceso de cambio y disfrutarlo.
Las referencias a los cuerpos de seguridad, piezas protectoras, señales de indicación de peligro, aeronáutica, el uso de pieles metálicas y las pinceladas de estética Clubber han configurado una colección de alto voltaje. Antonio Sicilia ofrece en esta colección tanto prendas masculinas como femeninas, con una clara inspiración en las conductas de comportamiento humanas.
Vértigo se muestra como una colección futurista, en la que el blanco y el negro han adquirido la mayor parte del protagonismo, también se han introducido pequeñas pinceladas de azul y naranja. Vestidos de neopreno, faldas con tablas, túnicas, trajes sastre y figuras oscuras que representan peligro son algunas de las apuestas de esta colección.
Sus prendas, que parecen estar en extremos contrarios, muestran una actitud valiente, aquella de los que se atreven a dar el gran salto y jugar a descubrir algo nuevo y mejor.
El broche final del desfile ha sido el “Desátame” de Mónica Naranjo como hilo musical del carrusel. Os dejamos con algunas de las fotografías del desfile.
“…Vértigo, no es el miedo a caer, sino las ganas de saltar…”
