¿Qué tendrá el otoño que enamora a tantos e incomoda a otros muchos? Simplemente es una estación que o la amas o la odias. Hay algunos que ven en el verano la mejor época del año y otros (donde personalmente me incluyo) que sólo vemos calor y más calor. Entonces llega septiembre, la calma, y algo de frío en el ambiente. Vuelta a la rutina y a la normalidad. Abrimos el armario con alivio. Es la hora de sacar las chaquetas, los jeans y nuestras botas favoritas que tantas ganas teníamos de volvérnoslas a probar. Por fin octubre, el mes otoñal por excelencia, donde toda su magia deslumbra con toques entre místicos y misteriosos.
Los días se vuelven cada vez más grises y los árboles tiñen sus hojas de tonos ocres, granates y cálidos justo antes de caerse. Aparecen las primeras lluvias e incluso la niebla, y con ellas nuestras ganas de quedarnos en casa. Disfrutando del hogar con un buen libro, una taza de chocolate caliente recién hecha y viendo nuestra película favorita debajo de la cálida manta. En familia, en pareja (sí, no sé si es el misterio en el ambiente o el frío que saca nuestro lado más romántico) o solos, reflexionando.
Octubre, el mes otoñal por excelencia donde toda su magia deslumbra con toques entre místicos y misteriosos
Si salimos a la calle el olor a castaña asada invade cada esquina. Quedamos más a cafés o tés, y para ir a teatros o cines, disfrutando con los estrenos de la nueva temporada. A todos nos invade un sentimiento de energías renovadas, de tranquilidad y calma. Nos dejamos llevar, como las hojas recién caídas, por un viento renovado y frío. “Se acerca el invierno” dicen los Stark, y a nosotros nos toca prepararnos. La moda lo sabe muy bien, ¿a quién no le gusta las colecciones otoñales? Cada otoño suspiramos por los jerséis de la temporada, aunque este 2020 más que por los jerséis, por los chalecos.
El otoño saca nuestro lado más familiar, desde el Día de los Muertos (o en España Todos Santos) hasta el Día de Acción de Gracias. Nos hace recordar nuestro pasado y todo por lo que debemos dar gracias, la mejor forma para prepararse para la Navidad.
Pero no sólo nuestro lado más familiar aparece en otoño. Entre las lluvias, el frio, la niebla y los aires de misterio, el otoño saca a relucir nuestros mayores miedos. En la noche del 31 de octubre, todos vemos la luna llena con algo de temor. Es la Fiesta de Halloween, donde todo puede ocurrir. Creas o no en los espíritus, hay que reconocer que el ambiente y las sensaciones de otoño acompañan muy bien a la temática.
Puede que este año 2020 todo sea diferente y algo caótico, pero hay algo que no cambia y es esa sensación de tranquilidad cuando oyes llover al otro lado de la ventana. La sensación de calidez al dormir bajo el edredón. Y, sobre todo, la sensación de que el frío pasará y en algún momento el sol volverá a brillar con todo su esplendor. Así nosotros volveremos a brillar también cuando toda esta situación termine. De eso, no cabe duda.