El pasado viernes 26 de febrero El Madrileño llegaba a todas las plataformas. Cuando C.Tangana escribía en Instagram que este iba a ser el disco de su vida, no se equivocaba. Un veneno fue una pista de lo que estaba por llegar. La primera canción escrita por el artista, un bolero que poco tiene que ver con sus comienzos como Crema. El cantante ya nos anticipaba que algún día diría adiós al mainstream. Y el disco lo ha confirmado.
«El Madrileño va de contar cosas importantes con palabras corrientes» decía en sus redes sociales. Catorce canciones y catorce videoclips (dirigidos por Santos Bacana) conforman el álbum elaborado al detalle, tanto a nivel musical como audiovisual. No hay ninguna duda de que C.Tangana se ha arriesgado como nunca. Nos habla del desamor y lo hace mostrando su esencia más pura. El artista ha sabido aprovechar su madurez y lo ha proyectado creando su propia obra de arte.
El Madrileño es un viaje por distintos géneros musicales. Una mezcla de sonidos tradicionales que los productores, Alizzz y Víctor Martínez, han fusionado con ritmos urbanos. La innovación no termina ahí. El álbum está repleto de colaboraciones que han aportado su granito de arena.
Conocíamos Demasiadas Mujeres a ritmo de tambores de procesión; la rumbachata de Tú me dejaste de querer (con el Niño de Elche y La Húngara); el pop de Nunca Estoy; el bolero de Un Veneno, que ahora reinterpreta en una versión remix con José Feliciano y la bossa-nova de Comerte Entera, junto con el artista brasileño Toquinho. Nominao y Hong Kong fueron la previa del lanzamiento del disco. ¡Y vaya previa! Nadie esperaba que C. Tangana se iba a arriesgar también con el rock. Ni que iba aparecer Andrés Calamaro.
Ahora nos sorprende con Párteme la cara (junto a Ed Maverick) donde nos deja frases como “duermo con el cadenón bien puesto porque pienso en las noches que soñé su peso”. El flamenco más puro lo encontramos en Ingobernable (con Gipsy Kings, Nicolás Reyes y Tonino Bailardo) y su «no me quieras querer». En Muriendo de envidia, Cambia! y Te Olvidaste podemos disfrutar de voces latinas como Omar Apollo, Carín León, Adriel Favela y Eliades Ochoa. Y tampoco podemos olvidarnos de Los Tontos con Kiko Veneno y un videoclip divertido donde un portero baila al ritmo de la canción mientras friega el suelo.
A las canciones ya mencionadas, hay que añadir una más con una colaboración bastante peculiar. Cuándo Olvidaré con Pepe Blanco, un artista riojano fallecido hace cuarenta años. Su voz pone fin a la canción con un discurso donde reivindicaba la música española: «Creo que la canción española es del pueblo, es de raza. Y te voy a decir una cosa. Cuando yo he oído cantar en el extranjero (…) he llorao oyendo cantar a cualquier artista español lo que no puede un inglés un fandango ni una jota ni un pasodoble, no puede cantarlo».