Blanca Suárez debutó en la serie ‘El internado’, hace ya 14 años, ha cosechado una serie de éxitos que la han posicionado como una de las mejores actrices de su generación. Aquella ficción adolescente lo cambió todo y puso a Blanca Suárez (Madrid, 1988) en el punto de mira del sector audiovisual. Después llegó otra serie, ‘El Barco’, esta vez como protagonista, las primeras películas –‘Eskalofrío’, ‘Carne de Neón’…– y, la guinda del pastel, su primer trabajo a las órdenes de Pedro Almodovar, ‘La piel que habito’. Había nacido una estrella. En los últimos años su popularidad no ha hecho sino crecer.
Además de su carrera cinematográfica, Blanca ha sabido desarrollar, como pocas intérpretes en España, su faceta como icono de estilo, su propia imagen de marca. Su fotogenia y sus estilismos la han aupado a las listas de mejor vestidas y le han reportado suculentos contratos publicitarios con firmas como Tous, Angel Schlesser o Etam.
Nunca faltan joyas en sus looks. La actriz se declara fanática de los diseños más minimal, que lleva tanto sobre la alfombra roja como en su día a día. En su última aparición pública, Blanca ha lucido varios diseños de la firma JOYS. Un collar de eslabones dorado con charm de perla cultivada, distintos anillos finos apilados, también en tonalidades doradas, y un set de piercings con formas de estrellas y lunas que combinan capas de oro amarillo con apliques brillantes. Piezas asequibles cuyo valor suma un total que no supera los 35 euros.
JOYS nace para dar respuesta a la creciente necesidad por tener joyas sobrias, posibles e intercambiables, hechas con materiales de calidad y a un precio razonable. O, en otras palabras: reformula los pilares de la bisutería tradicional y propone nuevos y excitantes caminos para dar cuerpo a estos accesorios low cost.
Entre las diferentes versiones de collares se distinguen propuestas que se asemejan a las gargantillas o chokers y se ajustan al cuello y otras que cuelgan varios centímetros por debajo. Los anillos son contundentes, en estilos que se alejan de todo convencionalismo; los brazaletes llevan llamativos eslabones y maxi cierres y los pendientes lucen originales siluetas. Composiciones infinitas, formas orgánicas y la posibilidad de llevar más de una (y de cinco) piezas en un mismo look sin caer en el exceso. Todos ellos bajo el leitmotiv 24/7: a cualquier hora y cualquier día de la semana.
Fotos: Gtres