Hay luz al final del túnel. La frase, repetida hasta la saciedad en el último año -con especial insistencia en el mundo de la música- adquiere toda su significancia ahora que sabemos que Carolina Durante están de vuelta.
Nunca se habían ido del todo. Recordemos su reinterpretación de la mano de Él Mató a Un Policía Motorizado del clásico de Séptimo Sello Espacio vacío, o el EP Del horno a la boca, ambas referencias que vieron la luz a lo largo del complicadísimo 2020. Pero el anuncio de la publicación del segundo disco de la formación madrileña definitivamente es una de las grandes noticias de lo que llevamos de año en el terreno de la música. Parece indicar que lo peor ha quedado atrás y que muchas y buenas cosas están por llegar más pronto que tarde.
Y la primera de esas señales es Famoso en tres calles, adelanto de un largo que se publicará a la vuelta de verano. Decir que Carolina Durante entregan un himno entra ya en el terreno del tópico, pero ninguna otra palabra define de mejor manera a un tema que redobla la intensidad de anteriores éxitos de la formación como Las canciones de Juanita o No tan jóvenes. Diego canta con más convicción que nunca sobre una base rítmica poderosa y las líneas melódicas dibujadas por las guitarras punkrockeras de Mario.
Ese es el impecable envoltorio de un nuevo ejercicio de observación social: si con Cayetano los Carolinos bautizaron a las juventudes de mentalidad conservadora en nuestro país, Famoso en tres calles se para a retratar a otro tipo de joven al que identifican desde las dos primeras líneas de la canción: “Ese chico de la esquina es un molón de categoría…”. La nadería absoluta en tiempos de tigres de papel.
Famoso en tres calles llega además acompañada de un explícito clip firmado por Carlos Saiz y con uno de los nuevos rostros del audiovisual español por protagonista: Omar Ayuso. Y es que seguro que hasta el protagonista de Élite alguna que otra vez también llegó a preguntarse “¿Y tú, qué serías capas de hacer por ser famoso en tres calles?”.