Hace apenas tres años, Ester Expósito (Madrid, 2000) solo era conocida entre los millennials que seguían ‘Élite’, la producción de Netflix en la que interpretaba a Carla, una adolescente consentida con una misteriosa personalidad gracias a la cual consiguió conquistar al público. Pero el 2020 ha sido el año en el que la popularidad de esta actriz de 21 años recién cumplidos ha crecido como la espuma y ahora todo lo que lleva se convierte en tendencia y objeto de deseo.
Prueba de ello es su cuenta de Instagram, que en cuestión de meses se ha convertido en una verdadera mina de oro para las marcas, que ven cómo sus seguidores crecen como la espuma encumbrándola ya como la española con más followers. Nada más y nada menos que 26,6 millones (y subiendo). Parece que además de su talento para la interpretación su buen ojo con las tendencias ha tenido algo que ver con su repentina fama.
Porque si algo ha sabido Expósito es rodearse de un buen equipo de estilistas para acertar con todos sus looks de alfombra roja y encontrar las opciones más favorecedoras en su vestuario para el día a día. En una entrevista reciente declaró que le resultaba imposible definir su estilo, que más bien consideraba “variado y versátil”. Y es que en un mismo día puede lucir unos mom jeans con sudadera y zapatillas con la cara lavada para después derrochar elegancia con un minivestido de lentejuelas y sandalias de tacón.
Era solo cuestión de tiempo que Expósito luciera un bikini de Ônne, la firma preferida de influencers y ‘fashionistas’. El modelo elegido por la actriz es el llamado Kelly Top. Se trata de un top de bikini sin tirantes de dos colores, blanco y negro, y que cuenta con un anudado por la parte delantera para ceñirlo al pecho al gusto. Está disponible en la web de la marca por 40 euros.
Los populares diseños de Ônne se elaboran en un tejido muy particular, similar al canalé, que abraza la piel y favorece a todo tipo de morfología. Así lo reconoce Gisela Cid, la fundadora de la etiqueta, que empezó a crear prendas de beachwear movida por su propia necesidad. “Me resultaba imposible encontrar bañadores que, por un lado, fuesen resistentes, duraderos y funcionales, pero que a la vez, tuviesen un guiño en el diseño que los hiciese apetecibles”.
Con el deseo de dar solución a ese anhelo nació esta pujante firma especializada en baño con una propuesta de valor tan sencilla como seductora: ofrecer colecciones de baño funcionales y novedosas pero que, sobre todo, empoderasen a sus clientas. O lo que es lo mismo, la vocación de Ônne es que todas las mujeres, con independencia de su figura y su estilo, puedan sentir que son la versión más sexy de sí mismas vistiendo un traje de baño.
Según reconoce Cid, “precisamente, uno de los puntos más importantes del crecimiento de la firma es el feedback de nuestras clientas y la forma en la que todas ellas embellecen, incluso con sus imperfecciones, nuestras piezas”. En su amplio espectro de clientas destacan nombres como el de Eugenia Silva, Aitana, Lola Índigo, María Pedraza, Marta Hazas o Greta Fernández, entre otros nombres internacionales como el de Nima Benati o la actriz Lali.