Hace ya tres meses de la elección de Barei como nuestra representante en el particular y complejo Festival de Eurovisión. Nuestra representante llega a Estocolmo después de realizar una gira promocional que la ha llevado a cinco países diferentes, donde se ha defendido de manera sobresaliente tanto en su relación con los medios internacionales como en sus actuaciones, destacando de manera notoria en redes sociales y entrevistas a nivel europeo, hecho muy importante el de defenderse perfectamente en ingles, ya que todos los representantes de cada país europeo, realizan perfectas entrevistas en ingles para poder así lograr llegar a todo el público eurofan, en este sentido Barei ha estado muy a la altura, consiguiendo estar durante estos tres meses como una de las protagonistas en redes sociales.
Después de superar con buena nota esta primera fase, que debe servir ya como requisito obligatorio para los futuros representantes españoles, si quieren descubrir que existe algo más allá de los pirineos, que sus éxitos a nivel nacional no sirven de nada en un continente donde hay que demostrar la valía desde cero, algo a lo que muchos no están dispuestos.
A lo que íbamos, la representante española a realizado sus primeros ensayos en el escenario del festival, logrando sorprender a la prensa allí acreditada con una “caida” enmarcada en la coreografía, una de las sorpresas de la puesta en escena de Barei, también al final de la actuación, logra con un «efecto» doblar la imagen de la cantante y sus coristas, otorgando así la festividad y el éxito después de la caída. Una actuación en la que las luces comienzan en un tono más sobrio y van cobrando vida a lo largo de la actuación, con una explosión de colorido en los estribillos. Unos primeros ensayos muy cerrados, en los que destaca que el trabajo esta ya muy adelantado, todo muy planeado, algo que se agradece porque a partir de todo esto se puede construir mucho más. En cuanto al estilismo la artista se ha mantenido en su línea con su personalidad, vestido dorado de lentejuelas en corte camisero, estilo urban, al igual que las coristas, pero en negro. Respecto al vestuario y peinado, Barei ya ha dicho anteriormente que en cada ensayo probará propuestas diferentes para ver cual funciona más.
Lo cierto es que en las encuestas no se ha producido ninguna subida, seguimos en el puesto quince, pero el año pasado subimos con los primeros ensayos hasta el Top 10, y luego tuvimos un desastre de resultado en la final. En Eurovisión nunca se sabe muy bien como acertar, este año no hay nada claro, casi todas las propuestas son muy comerciales y con poca personalidad y para mi gusto creo que se agradecerá algo de espontaneidad, y seguramente no vamos a ganar, pero lo importante en el festival es dejar huella y yo creo que la buena energía de Barei no la pueden controlar ni Rusia, ni Ucrania, ni la lejana Australia. De todos modos todo se va a seguir perfilando, Barei sigue en contacto directo con todos los eurofans españoles y ha asegurado que realizará cambios en la realización y la iluminación. El domingo 8 a las 13:21 horas, veremos como se producen esos cambios y como evoluciona este loco festival en el que no hay nada claro, puede que estemos ante la remontada de Barei después de la “caída”, como defiende su canción.