Hay una especie de áurea que cubre el verano, un sentimiento absoluto de ligereza, donde todo pesa menos, el cuerpo porque le arrancamos capas y los problemas porque se desvanecen entre el ruido de las olas. El mundo parece un lugar más amable tras quitarse el reloj de la muñeca dispuestos a no ceder a los tiempos estipulados a los que ya vivimos anclados el resto del año, una época breve en la que nos dejamos caer sobre la arena mojada, sobre el mar helado como en un fotograma de alguna película de Eric Romher donde jamás hubo prisa. Todas esas sensaciones las recogemos una a una para crear una lista de las cinco películas perfectas para ver durante estos meses de sol y salitre.
Dirty dancing
En 1988 Emile Ardolino dirige una de los films más icónicos de todos los tiempos con Patrick Swayze y Jennifer Grey como protagonistas. Un clásico del cine que se remonta al verano de 1963. Baby, la protagonista, va de vacaciones a un resort junto a su familia y allí se enamora de un profesor de baile, entre sensuales coreografías y temas imborrables, entre ellos: (I’ve Had) The Time of My Life.
Call me by your name
La película del italiano Luca Guadagnino retrata un amor de verano basado en la novela de André Aciman, un romance que ha dejado devastado a todo aquel que se ha asomado a contemplarlo. La relación se fragua a fuego lento en un pueblo del norte de Italia en el 1983, dos meses en los que Elio (Timothée Chalamet), un adolescente de 17 años, y Oliver (Armie Hammer), un estudiante de arte de 24, dan rienda suelta a sus sentimientos en medio de un ambiente idílico entre chapuzones en el rio, lecturas bajo el sol y bailes desenfrenados al atardecer.
Vicky Cristina Barcelona
Escrita y dirigida por Woody Allen cuenta la historia de dos jóvenes estadounidenses Vicky (Rebecca Hall) y Cristina (Scarlett Johansson) que deciden pasar el verano en Barcelona enamoradas de la arquitectura y el idioma que envuelve a la ciudad. Todo se complica cuando conocen en Juan Antonio (Javier Bardem), un pintor famoso dentro de los círculos bohemios que mantiene una relación turbulenta con su ex mujer, interpretada por Penélope Cruz que pondrá patas arriba las vidas de las protagonistas.
El rayo verde
Una obra de una belleza incontrolable cuyos diálogos se construyeron a raíz de la improvisación de los actores. La película es Marie Rivière en plenitud, que encarna a Delphine, un personaje lleno de matices, una mujer quebrantada que está aprendiendo a lidiar con sus emociones. Eric Rohmer filmó la película como una especie de documental entre las playas de Biarritz insistiendo en el fenómeno natural que da nombre al largometraje: El rayo verde, del que habla Julio Verne en su libro homónimo: un último halo de luz que deja el sol, cuando se dan ciertas condiciones meteorológicas, al ponerse en el horizonte.
El talento de Mr. Ripley
El sur de Italia vuelve a ser el escenario de un verano de ensueño a finales de los años 50. Basada en la novela homónima de Patricia Highsmith. El thriller psicológico expone un triángulo amoroso entre Tom Ripley (Matt Damon), Dickie (Jude Law) y su novia Marge (Gwyneth Paltrow), un verano entre paseos en velero por el mediterráneo, desayunos bajo el sol y clubs de jazz. Una existencia de lujos en la que Ripley irrumpe gracias a una telaraña de mentiras y hará cualquier cosa por quedarse a vivir en ella.