Como en casi todos los aspectos de la vida, las mujeres todavía tenemos que abrirnos paso en el mundo del cine. Sobre todo en el papel de directoras. Como actividad profesional de gran reconocimiento que es, ha sido exclusiva de los hombres hasta hace muy poco tiempo. E incluso podría decirse que lo sigue siendo.
Pero la realidad es que se han producido grandes películas a las órdenes de mujeres que merecen mucho la pena. Si estabas buscando tu película de tarde de domingo echa un vistazo:
- Elisa y Marcela
Dirigida por Isabel Coixet (La vida secreta de las palabras, La librería), esta película cuenta la historia de amor entre dos mujeres a finales del siglo XIX. Ellas son Elisa (Natalia de Molina) y Marcela (Greta Fernández). Se conocieron en la escuela cuando eran pequeñas y fueron grandes amigas. Pero sus familias vieron en seguida que aquello era más que amistad y las separaron. Años después, Elisa y Marcela vuelven a encontrarse. Ahora son dos jóvenes que no tienen intención de reprimir sus sentimientos y se dejan llevar.
Pero, como era de esperar, la relación entre ambas debe ser clandestina. En pueblos como los suyos, las habladurías, los corrillos y los juicios están a la orden del día y les supondrá todo un reto quererse. Tendrán que inventarse cientos de excusas y huir de todos aquellos que condenan su amor y quieren acabar con él.
Es una película preciosa donde lo que se trata es el amor y sus dificultades. Se aleja del estereotipo de película de lesbianas dirigida por hombres donde se aprecia la mirada masculina que convierte la relación homosexual en un objeto de deseo para sí mismo. Las escenas de sexo entre las mujeres están cargadas del mismo amor y cariño que se profesan en el resto de la película. La sutileza de los detalles en los gestos de ellas es riquísima, sobre todo en la etapa escolar.
Entre los muchos tabúes que trata esta película está ese precisamente. El amor entre dos niñas pequeñas, algo que ocurre frecuentemente. Sin embargo, vivimos en una sociedad donde se impone normativamente la heterosexualidad y cualquier otra orientación sexual ha de ir acompaña de una conversión (con todas las connotaciones que esa palabra implica) que tiene lugar años después. No obstante, Coixet relata acertadamente el proceso de manera natural en ellas, sin suponer un drama y ni un autocuestionamiento. Un amor plagado de cariño y sacrificio que está basada en una historia real.
- Las Niñas
Una de las películas que más galardones se llevó en los Goya. Dirigida y escrita por Pilar Palomero, quien ganó el Goya a Mejor Dirección Novel y Mejor Guión Original. Esta cinta nos traslada a Zaragoza, al año 1992. Celia es una niña de 11 años que va a un colegio de monjas donde la juzgan por ser huérfana. La historia relata el ambiente de España a principios de los 90, donde los ecos y mensajes que llegaban fruto del aperturismo colisionaban con lo castizo y tradicional de las costumbres que aquí se trataba de mantener afianzadas. Es un relato sobre la brecha entre los nuevos y los viejos tiempos visto desde la perspectiva de una niña, que no acaba de entender cómo funciona el mundo.
El nombre de la película, las niñas, responde al grupo de amigas que Celia tiene en el colegio y que conforma una parte sustancial de la historia. Alejadas de los mandatos paternos y adultos, las niñas se confiesan entre ellas, cometen locuras e irresponsabilidades, saboreándolas con el doble gusto que supone hacer algo placentero además de prohibido.
Como mazo dictador de gran parte de los preceptos y valores sociales se encuentra la religión, tan presente en la vida de las niñas. Esas niñas que, mientras que en el colegio reciben una educación, experimentan en sí mismas y en el resto del mundo una realidad completamente diferente.
¿Qué te juegas?
Aunque a las mujeres nos encante hacer películas de dramas y vivencias (pues así es parte de nuestra vida en esta sociedad), el cine español tiene buenas comedias firmadas por mujeres. Es el caso de ¿Qué te juegas? Está dirigida por Inés de León (El casting, La carta) y protagonizada por Leticia Dolera, Javier Rey y Amaia Salamanca. Esta última interpreta a Daniela, una ejecutiva seria y sin escrúpulos centrada exclusivamente en el trabajo. Su hermano Roberto, Javier Rey, se propone encontrar a alguien que enamore a su hermana. Y allí aparece Isabel, Leticia Dolera, la única persona que ha hecho reír a Daniela. Pero Isabel es una cómica de clase media que no encaja para nada en el mundo de lujos y comodidades en el que vive Daniela.
Es una historia donde la orientación sexual de cada una de las partes no supone el punto central, sino que se trata con completa naturalidad y en un plano muy secundario. El punto de comedia radica en la parodia que se hace a todas las historias de amor y competición entre hermanos por amor.
Crudo
Está dirigida por la francesa Julia Docurnau y tal y como su nombre indica, esta película habla de lo crudo y es muy cruda de ver. Justine (Garance Marillier) es una joven belga que comienza su primer año de universidad. Estudia veterinaria y es vegetariana, dos factores que, aunque no son excluyentes, muchas veces van de la mano. Lo sorprendente es que Justine se ve envuelta en un ambiente inquietante y extraño que le cambia la vida, y la personalidad. Comienza a consumir carne hasta el punto de que se convierte en caníbal.
La película está plagada de escenas e imágenes muy duras y muy explícitas. No es, desde luego, apta para todo el mundo. Pero aquellos que puedan, disfrutaran de un cine cruento e impactante, lleno de acción y de tensión.
El proceso de cambio de Justin es el resultado de toda una infancia donde no ha conocido más que la realidad que se vivía en su casa: el vegetarianismo. Cuando vuela del nido, como suele ocurrir en muchas familias en la etapa universitaria, los lazos familiares pierden fuerza. Todas las advertencias y enseñanzas que sus padre invirtieron en Justine quedan dejadas de lado cuando ella ve que no son suficientes para encajar en el complicado mundo universitario. El debate sobre si sucumbe a la presión social o si descubre su verdadera forma de ser está abierto.