Quién lo diría querido, aún estamos así. A las puertas de un nuevo año, tu año, con la sensación de empezar el tercer acto del 2020. Tres años ya de pausa, o más bien de un cambio total de medición del tiempo. Primer año de pandemia, segundo año de pandemia… Ya lo siento 2022, pero tus predecesores te han dejado el mundo bastante tocado. En la salud, en la economía, en el bienestar, en los miedos… Pero tú no te preocupes, tan sólo necesitamos algo de tiempo para que todo esto se calme.
Porque querido 2022, en qué momento llegas. Los ánimos están por los suelos, el miedo al contagio (y contagiar) más presente que nunca y las esperanzas de que esta pandemia termine algo difusas. En el 2021 hemos aprendido la lección: tiempo al tiempo, sin prisa y sin adelantarnos, todo llega en su momento. ¿Serás tú el momento de que superemos el coronavirus?
2022: tan sólo queremos volver a mirar al futuro sin temer el presente
Querido 2022, sé bueno con nosotros. No te pedimos grandes cosas, tan sólo un respiro. Tranquilidad y descanso. Un año sin sobresaltos. Un año con más certezas y alguna que otra alegría. Para calmar nuestras mentes y reencauzar nuestras vidas. Querido 2022, tan sólo queremos volver a mirar al futuro sin temer el presente.
De verdad, para este año no queremos grandes aprendizajes vitales, ni historias de ciencia ficción y distopia cada mes. Queremos que vayas con calma, que nos des tiempo para recuperar la fuerza de nuestras esperanzas después de dos años de pandemia y sus variantes, ventiscas, volcanes e inestabilidad.
Introducción, nudo y desenlace pic.twitter.com/9qSzPA7nJv
— alba (@albaricoque_acg) December 31, 2021
Tan sólo te pedimos bienestar y reencuentros. Pero reencuentros de verdad, sin medir las distancias, sin mascarillas ni burbujas y dando todos los beso guardados en estos años. Vivir sin límites y amar sin límites. Te pedimos volver, volver de verdad a los conciertos multitudinarios, a los viajes improvisados y a esa tranquilidad que sólo un abrazo bien dado sabe darnos.
No queremos los grandes milagros de Año Nuevo, tan sólo un par de certezas y alguna que otra alegría
En definitiva, querido amigo, no necesitamos que nos des de esos grandes milagros de Año Nuevo, sino tan sólo algo de paz. Esperanzas, ilusión, aire fresco y más certezas, es todo lo que necesitamos, nada más y nada menos. Pues eso 2022, danos un respiro.