Esta era su primera entrevista desde 2016 y su vuelta ha sido de la mano de Vogue. Han pasado cinco años, en los que la artista ha estado alejada del foco público. Desde entonces, mucho ha pasado en su vida. Se divorció de Simon Konecki y se ha centrado en su hijo y en cuidarse a sí misma. Ahora, Adele vuelve a la música. Y lo hace con Easy on me, un single que habla de su separación inicia esta nueva etapa, y que sale este mismo viernes, 15 de octubre. Su nuevo álbum, en palabras de la propia cantante, se dirige a sí misma. Para ella, es «autodestrucción, después autorreflexión y después una especie de autoredención». Ahora es el momento, está preparada para que el público escuche «su parte de la historia».
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La británica explica que Easy on me habla de su separación. Tras el divorcio, su hijo tenía muchas preguntas, para las que la cantante no tenía una respuesta. Entonces, llegó el momento de componer Easy on me: «Sentí que quería explicarle, a través de esta canción, cuando tenga veinte o treinta años, quién soy y por qué elegí voluntariamente desmontar toda su vida en la búsqueda de mi propia felicidad. Le hizo muy infeliz a veces. Y esa es la verdadera herida que no sé si alguna vez seré capaz de curar». Aclara que no estaba viviendo una tortura, pero no quería terminar como mucha gente.
En este álbum también quiere dejarle una enseñanza a Angelo sobre cómo tratar a su futura pareja. Como madre, intenta ser lo más sincera posible, para evitar el agotamiento que arrastró ella de adulta. Le costó asimilar la ruptura de sus padres y quizás eso fue por excesivo cuidado a la hora de abordar el tema: «No son las malas decisiones las que fastidian a nuestros hijos, son las indecisiones», afirma. Lo que queda claro es que, después de esta etapa, Adele tiene los estándares más altos que nunca. Echa la culpa a las películas, que venden historias irreales: «En su momento me rompió el corazón, pero ahora lo encuentro tan interesante. Cómo nos dicen que nos aguantemos».
Una Adele fuerte y decidida
Uno de los temas más esperados fue el del sorprendente cambio físico de la intérprete en los últimos años. Adele cuenta que fue impactante para la gente porque «perdieron el hilo», pero la pérdida del peso fue a lo largo de dos años. ¿La razón? Su ansiedad: «Entrenando, me sentía mejor. Nunca fue por perder peso, siempre fue para hacerme fuerte y no estar tanto tiempo con el móvil cada día. Me hice adicta a ello. Entreno dos o tres veces al día», cuenta.
La artista que no es factible para todos, pero que lo necesita para estar bien psicológicamente. Muchos han intentado asociarse al proceso de la artista, pero ella desmiente muchas de las cosas que se han dicho. Niega que se haya sometido a una dieta y nada de «cuerpo de venganza»: «Es ridículo. Creo que es que la gente quiere retratar a la mujer divorciada haciendo ejercicio sin control. Como si estuviese enfadada y hubiese decidido que quiere ser una puta. Porque, qué es una mujer sin su marido?», espeta.
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Pero esto no es todo. En plena entrevista, Adele confirmó su relación con Rich Paul, un agente deportivo. Reconoce que es está muy feliz en su relación: «Es genial. Es tremendamente gracioso. Es tan inteligente, ya sabes», comenta. Y este es su estado actual, donde se ha convertido en una mujer fuerte y que sabe lo que quiere. Esto lo refleja su nuevo álbum: «Tomé la decisión consciente de preguntarme, por primera vez en la vida, ‘¿Qué es lo que quiero?'». El resultado, lo podremos escuchar muy pronto.
Foto de portada: British Vogue