‘Adiós’, la última película dirigida por Paco Cabezas se ha estrenado hoy en la gran pantalla. Un film de trama criminal donde la muerte se apodera de los nervios de una familia sevillana que se toma la justicia por su mano. La película está protagonizada por Mario Casas, Natalia De Molina y Carlos Bardem.
Sinopsis: Juan (Mario Casas), preso en tercer grado y padre de familia, logra un permiso para asistir a la comunión de su hija en Sevilla. Pero la muerte accidental de la niña destapa todo un entramado de corrupción policial y narcotráfico, y el caso acaba en manos de Eli, una inspectora que tendrá que lidiar con los recelos de un sector de la policía y del padre de la pequeña, que quiere tomarse la justicia por su cuenta
La película está contada en fases, esas fases en las que se vive el duelo de su hija. Nadie dijo que la muerte fuese fácil. El accidente y la muerte de la pequeña desencadena una serie de sucesos que los llevarán a destapar una de las tramas de corrupción más grandes de los barrios marginales de Sevilla. En estos barrios, la gente se toma la justicia por su mano: ‘ojo por ojo y diente por diente’, esa es su filosofía.
Es bastante complicado meterse en el barrio de las tres mil viviendas y grabar una película. Se ha entendido a la perfección las marginalidades que existen en esa zona sevillana y la vida que llevan los ciudadanos que allí habitan. Drogas, silencio y corrupción, eso reflejan esos barrios tan característicos. Paco Cabezas, el director de la película nos ha trasladado a la Sevilla más profunda donde la sangre es lo más importante que existe, sea como sea la familia no se toca.
El clima y el ambiente ha sido muy destacable. Pero, también, el personaje de Mario Casas, este chico no deja de sorprendernos, desde que abandonó el papel de sex-symbol adolescente, solo nos da alegrías. Un muy buen personaje, que tiene un recorrido maravilloso donde el odio, rencor, silencio y pena le hacen recorrer sentimientos muy enfrentados a lo largo del film. Además, le acompaña Natalia De Molina, que aunque está en su línea le hace una réplica perfecta. Si tuviera que destacar algo negativo, sería que el acento sevillano. Hay veces que desaparece, pero es complicado hacer de andaluz y hacerlo bien. Una de las interpretaciones que más sorprende es la de Carlos Bardem, no estamos acostumbrados a verlo en este tipo de personajes, bien ejecutado, centrado y con sangre fría. Buena interpretación.
Hay veces que digo este tipo de cosas, porque hay que mencionar a los departamentos de fotografía, vestuario y montaje. Los planos aéreos son exquisitos, el vestuario es real y el montaje está bastante conseguido. En general, es una película bien realizada, dirigida e interpretada. (Valoración: 8/10)