Aitana baja las estrellas para despedir Starlite Festival

Hoy volví a viajar entre las estrellas más brillantes el firmamento, donde me encontré a Aitana, una pequeña gran persona que solo con su voz ilumina el despertar más oscuro. En una semana donde la cultura es la protagonista en la capital de la Costa del Sol, la ex triunfa ponía banda sonora a su despedida. Después de todo un mes viajando, sin parar, por un calendario exquisito repleto de artistas nacionales, llegaba hoy su último día, Starlite Festival, cerraba las puertas de su edición más segura.

Me tocó acompañar a Aitana, una cálida chica que desprende magia solo con mirarla. Es un haz de luz que abre el cielo para interpretar lo mejor de su corazón bajo un manto de estrellas que se convierten en cómplices. La primera vez que veía a Aitana en directo, tenía miedo, me sentía nervioso. Tenía las expectativas muy altas y no quería que me decepcionara -me hubiese ido bastante agobiado si esto hubiese sido así- pero, sin embargo, fue todo lo contrario. Fue un concierto repleto de inocencia, cercanía y emoción. 

Sonaban los primeros acordes de un concierto íntimo y en acústico que pondría fecha a la vuelta de Aitana a los escenarios tras nueve meses de parón. Un parón que no se notó, porque ante los nervios de la primera canción, la artista fue firme y pisó fuerte –y tan fuerte que decidió estar descalza durante todo el show-.

Continuaba la velada y ante lágrimas de emoción la artista presentaba su próxima canción que le dedicaba a su madre: »Esta canción se la dedico a mi madre porque mi abuelo está enfermo en el hospital y sé que ella no está muy bien, esta canción va por ella, ‘Si tu la quieres». Con lágrimas en los ojos comenzaba la primera estrofa de una canción donde el público, sentado y con sus mascarillas, le hacía llegar todo su cariño. Vuelvo a repetir, yo tenía miedo de este concierto, Aitana ha tenido mucho éxito tras su paso por OT 2017 y eso ‘acojona’, puede convertirse en un bonito producto que llega a su final, pero no. Atenta, delicada y con un maravilloso directo me sorprendió, muy gratamente, la artista barcelonesa. 

El momento mágico llegó con las baladas más conocidas de la cantante, todos lo estábamos deseando, todos queríamos que llegara ese momento. ‘Con la miel en los labios’ y ‘Vas a quedarte’ fueron el plato fuerte de la noche. Derroche de voz, calidad interpretativa y magia, algo que no tienen todos los artistas. Mirarla y sonreír, sin saber por qué, eso es mágico. 

Que el concierto fuese en acústico garantizó que todo fuese seguro. Pero, la cantera del festival marbellí se venía abajo cuando Aitana decidió cantar ‘+’, una canción que tiene con Cali y El Dandee y que era la primera vez que cantaba en uno de sus conciertos. La piel erizada desde el minuto uno hasta el final de la canción porque el talento de esta chica es desbordante. Ante los gritos de sus fieles seguidores se despedía de un concierto que fue único y mágico bajo las estrellas de Starlite Marbella, que hoy llegaba a su última jornada.