Noches de glamour, noches de buenos looks (o no), pero comencemos por el principio, que siempre son más idílicos. Los BAFTA y los Grammy, una noche donde premiar el talento musical. Miles de celebridades acuden para ser fotografiados por las cámaras y se meten en el ojo del huracán ante la crítica mirada de los que sabemos de moda. Pero, para sorpresa de muchos, esta edición no ha estado centrada solo en el talento, sino que estéticamente hablando, nos hemos encontrado con muchas sorpresas (¡y buenas!).
Margot Robbie y Thandie Newton
Dos complejos estilismos que han brillado por su elegancia inaudita. Margot Robbie se convierte en una de las mejores vestidas de la gala con un vestido de Chanel de lentejuelas blancas y tul de seda negro. La firma francesa no suele destacar en las alfombras rojas. Está claro que siempre hay una primera vez para todo.
Sí, Thandie; sí. Estas son las ocasiones en las que una debe apostar por opciones arriesgadas, voluptuosas y nada sutiles. El que no arriesga no gana y con este Valentino la victoria estaba asegurada. Compuesto por una falda muy voluminosa de tul negro con estampado geométrico y un corpiño ajustado, Newton se condecora como una de las más elegantes de la noche.
Miley Cyrus e Irina Shayk
La cantante y la modelo han compartido buen gusto en los Premios BAFTA y el los Grammy 2019. Ambas se han decantado por la sobriedad y la elegancia del negro, con toques satinados y encarnando el empoderamiento femenino enfundadas en un traje masculino. Sencillez, sensualidad y sofisticación. ¿Qué más se puede pedir?
Dua Lipa y Lady Gaga
El dúo de divas ha querido brillar más que las estrellas con dos estilismos cargados de mucho brillibrilli. La cantante Dua Lipa se ha decantado por un vestido con escote de corazón y cola de Versace Atelier. Hay que decir que es un diseño muy complejo: drapeados, lentejuelas, cola… Se lo ha colocao to y aún así, va la mar de mona Qué guapa va esta chica siempre.
El cambio de estilista de Gaga se nota. La estrella más brillante de la noche apostó por un vestido muy sencillo de Celine. Repleto de lentejuelas plateadas y con un volante en el lado izquierdo, la cantante ha demostrado nuevamente que la época de los vestidos de carne cruda se han terminado.
Kate Middleton y Heidi Klum
Dos mujeres completamente distintas, Kate Middleton y Heidi Klum. Ambas comparten color. Ambas llaman a la atención de las cámaras y ambas se coronan como las mejores vestidas, aunque ya tenían corona- una por ser la princesa de Inglaterra y la otra por haber liderado el puesto número uno de las top models de los 90’s.
Anna Kendrick y Jennifer López
Ralph&Russo, el diseñador en el que han confiado Anna Kendrick y Jennifer López. Hacía tiempo que Kendrick no se posicionaba entre las mejores vestidas. Esta edición se lo ha ganado. Con un vestido rosa empolvado lleno de plumas, la actriz de Dando La Nota nos recuerda la inocencia de las fiestas de pijamas (¿Alguien más las echa de menos?).
Sin embargo, la diva del pop, JLO representa justo todo lo contrario a la inocencia. Con un vestido blanco entubado, sin mangas y con pedrería, la actriz demuestra sus curvas de escándalo.
Salma Hajek, Glenn Close y Cate Blanchett
Este trío pone a prueba el clasicismo y demuestra que el negro siempre es un acierto. El color por excelencia de la sofisticación se adapta a cada estilo de las artistas para favorecer cuerpo y hacerlas destacar desde la oscuridad. Salma Hajek apuesta por un vestido con manga asimétrica y un lagarto confeccionado en strass de color dorado en la zona del escote. Cate Blanchett se decanta por un Christopher Kane, el cual logra fusionar la elegancia y la sobriedad con la modernidad. Ese cóctel que tanto nos enamora en las alfombras rojas. La más veterana, Glenn Close, ha escogido un vestido de Alexander McQueen. Hablamos de un diseño bastante sencillo que quizás en otra persona no destacaría, pero la elegancia intrínseca de Glenn nos ha cautivado. Si ya lo dijo Lagerfeld: la elegancia es una cualidad física. Si no la tienes vestida, no esperes tenerla desnuda.
Cardi B
Pero la mayor sorpresa vino de la mano de Cardi B. La cantante se presentó en la alfombra roja con un vestido que nos recuerda a la Venus de Botticelli. Firmado por Mugler, Cardi B demostró ser la personificación de la belleza y sensualidad. Un diseño muy original que, sin duda y aunque no sea para todos los públicos, no pasó desapercibido.