Encontrar la mejor oferta online nunca ha sido fácil, y las tácticas furtivas que los portales de ventas utilizan para hacerse con nuestro dinero sólo lo complica más. Todos hemos sido víctimas (no lo neguemos), ya fuese en Expedia, Booking.com o similares, del acuciante «queda sólo una habitación a este precio» o del típico «reservado cuatro veces en las últimas 24 horas». Y aunque creamos que podemos mantenernos al margen de estas estrategias, nuestro cerebro puede traicionarnos. Por eso, para que no te vuelvan a pillar desprevenido/a, aquí tienes algunas de las cosas que debes tener en cuenta al hacer compras online.
Ventas por presión
Los sitios de hoteles en línea utilizan esta táctica para tratar de convencer a los consumidores de que compren de inmediato y no verifiquen si realmente están obteniendo la mejor oferta. Lo más usual es que aparezca un mensaje afirmando que otro cliente está buscando el mismo alojamiento o que cierto hotel ha sido visto una cierta cantidad de veces. A veces, estas cifras pueden ser alarmantemente engañosas, llegando incluso a ser generadas artificialmente por el propio sitio web para, de alguna manera, coaccionar al cliente apelando a su miedo a perder la oportunidad y asegurar la compra
Ventas flash falsas
Las ofertas de tiempo limitado, muy usuales en sitios como Amazon, se están investigando recientemente de forma exhaustiva, ya que en una gran mayoría de ocasiones su funcionamiento es poco transparente. La táctica más utilizada consiste en publicitar un producto a un precio igual o incluso superior al que se ofrecía anteriormente como si estuviese extremadamente rebajado. Otra manera de utilizar esta estrategia, combinada con la anterior, utiliza ventas de alta presión para los consumidores mediante el uso de temporizadores de cuenta regresiva en sus sitios web.
E-mails trampa y cookies traicioneras
El marketing por correo electrónico se ha convertido en el recurso favorito de las tiendas online para hacer que los compradores vuelvan a revisar las cestas no «consumadas». Las webs generan una gran cantidad de correos electrónicos que bombardean al cliente y lo alientan a regresar y comprar los artículos que dejaron sin pedir. Además, debido a las cookies y el funcionamiento de los anuncios en línea, los recordatorios de los artículos que se han visto en Amazon o eBay literalmente persiguen al consumidor por la red. Algunas aplicaciones de compras como Wish.com, incluso ofrecen un «bono de inicio de sesión diario» para que los compradores accedan a la aplicación con mayor asiduidad.