Es viernes por la noche. Se avecina un finde semana de tormenta, de esos de los de peli, sofá y manta. Pero eso será mañana, porque hoy vamos al teatro. A uno de nuestros clásicos, el Teatro Lara, y vamos a ver Capullos que Vuelan.
Anuncian el estreno de su sexta temporada. La sala se llena e incluso soy capaz de distinguir alguna cara conocida. Los actores y actrices interactúan con nosotros a pesar de que la obra todavía no ha empezado. Una de ellas me pide que nos hagamos una foto. Me pregunto dónde acabarán; aunque tres, dos, uno, ya está hecha. Anuncian que silenciemos nuestros teléfonos móviles. Lo que significa que el espectáculo está a punto de comenzar.
Pau es uno de esos jóvenes que tuvo que emigrar para intentar cumplir su sueño pero, en medio de una conversación por Skype, se da cuenta de que no quiere seguir viviendo lejos de su familia y amigos. Tampoco quiere dejar de luchar para ser un gran escritor y, convencido de que nada es imposible, pretende convencer también a sus compañeros de piso de que se unan a él y persigan su vocación cueste lo que cueste.
Pero Iñaki (el informático, romántico y el sustituto de Pau), Tere (la influencer en prácticas pluriempleada) y Rut (la ex-novia hater) no estarán dispuestos a dejar sus trabajos rentables por la ilusión de un poeta.
Las actuaciones por parte del reparto son frescas, inteligentes y muy sabrosas. En esta obra se habla de relaciones, política, y de lo mal preparado que está el mundo para nosotros, los jóvenes. Todo ello en cuatro discursos que enlazan cuatro palabras clave: larvas, gusanos, capullos y vuelan.
Aún así, y a pesar de toda la crudeza de la realidad que nadie nos cuenta cuando somos pequeños, esta producción es capaz de sacarte una sonrisa (o dos), ya que la escena se disfraza al viejo estilo del sitcom norteamericano con sueños, felicidad y mucha ilusión por vivir. Porque todo depende de como te tomes las cosas.
No obstante, lo más importante es que es una historia real que nace de un texto atrevido con cierta dosis de realidad aplastante. Nos abofetea, nos abre los ojos y nos dice “Oye tú; sí tú, el del móvil, despierta”.
Así que, si tú también quieres despertar (y reírte un rato), ‘Capullos que vuelan’ te espera cada semana en el Teatro Lara.
Equipo artístico:
Dramaturgia y dirección: Lluis Mosquera.
Reparto: Cristina García, Anna Colet, Ricard Balada, Enrique Cervantes, María Part e Iker Azcoitia.
Equipo técnico:
Ayte de dirección: Jens de Fries.
Iluminación y sonido: Matyssa Santos.
Producción: Carlos g. Delavega.
Productora: Serie Teatro.
Arte: Celia Nacimiento.
Escenografía: Marga & Marja.