La humorista Carolina Iglesias ha abierto las puertas de su casa para jugar un parchís con Freeda, la plataforma que difunde historias reales para inspirar un cambio positivo. La influencer, de 28 años, reconocida por su trabajo a favor de los derechos LGTBIQ+ ha reconocido que le contó a su madre que era bisexual justo antes de comer las uvas una Nochevieja, noticia que fue recibida con total normalidad en su entorno familiar.
“Se lo dije a mi madre justo antes de que Ramón García dijera que bajaba el carrillón. Al día siguiente, Geno de OT salió diciendo que era bisexual y mi madre me miró y me dijo ‘mira, como tú’. Y ya dije ‘todo perfecto, a otra cosa’”, cuenta Carolina Iglesias al equipo de Freeda.
Reconocerse como una mujer bisexual no resultó tampoco tarea fácil. De hecho, la youtuber asegura que toda su adolescencia la pasó creyendo que era heterosexual. Sin embargo, a partir de los 22 años, Iglesias intuía que algo más pasaba dentro de ella, pese a estar segura de que no era lesbiana.
“Lo pasé mal porque todas mis amigas eran lesbianas. Yo sabía que no lo era, pero también sabía que algo pasaba. Al final, me di vergüenza negando que no podían gustarme las mujeres. Fue difícil porque, aunque tengas el mejor ambiente del mundo, tú misma eres el propio problema a veces, por lo que contarlo es lo mejor. Cuando te dicen ‘¿y para qué lo cuentas?’, pues para que la gente no lo pase mal”, añade.
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Pero detrás de la Carolina Iglesias humorista y dicharachera también se encuentra una persona que ha sufrido bullying, según lo que ella misma ha contado a Freeda. Echando la vista atrás, la gallega recuerda una infancia en la que el bullying no llegó a lo físico, razón por la que subraya que a lo mejor los niños no se daban cuenta de lo que hacían. “Cuando te quieres morir todos los días por cómo te trata la gente, algo pasa. A mi yo de la adolescencia le diría que siga así, porque luego, a partir de los 18 años, la vida es maravillosa”, continúa Carolina Iglesias en su charla con Freeda.
En lo profesional, es una mujer con éxito, aunque eso no quiere decir que la gente reconozca su talento de primeras, lo cual, en ocasiones, la ha llevado a sufrir episodios de ansiedad. Durante su conversación con Freeda, Carolina Iglesias ironiza sobre la (no) predisposición a escucharla o lo habitual que es que atribuyan su presencia actual en los medios a que “las mujeres están de moda”.