En nuestra sociedad nos vemos atrapados en demasiadas exigencias intentando crear una agenda en la que podamos dedicar tiempo al trabajo, la familia, los amigos, nuestras aficiones y además tener un buen descanso asegurado. Para encajar todas las actividades programadas a veces prescindimos en horas de sueño. Sin embargo, esto es un gran error ya que repercute directamente en nuestra psique y salud física.
El neurocientífico experto en sueño, Merril Mitler explicaba que “El dormir mantiene todos los aspectos del cuerpo de una forma u otra: el equilibrio energético y molecular, así como también la función intelectual, el estado de alerta y el humor”.
Debido a todo el estrés acumulado durante el día se puede volver complicado alcanzar el estado de relajación adecuado para tener un buen descanso. En la sociedad actual con tanta presencia tecnológica podemos recurrir fácilmente a una serie para quedarnos dormidos pero esto disminuye considerablemente la calidad del sueño. Todos estos factores pueden desencadenar en desvelarse de continuo por la noche o llegar incluso a sufrir problemas más graves aún como apnea del sueño.
En promedio un adulto necesita entre 7 y 8 horas de sueño por noche, mientras que los niños necesitan al menos 9 horas y los bebés alrededor de unas 16 horas. Es importante que estas horas sean una noche completa de sueño de calidad.
El insomnio es otro factor que está atacando a la sociedad sin piedad, cada vez son más las personas que no consiguen conciliar el sueño al irse a la cama. La ansiedad por querer quedarse dormido hace que entres en un bucle en el que no estás en un estado de relajación y empeora la situación. La mayoría de las personas tienen insomnio ocasionalmente. El insomnio crónico puede ocasionar durante el día agotamiento, irritabilidad y dificultad para la concentración.
Existen muchos tipos de recursos para intentar combatir todo este ruido que nos impide dormir y conseguir una buena calidad de sueño. Entre ellos se encuentra el mindfulness, las técnicas de respiración profunda y los medicamentos naturales.
Nuestra creatividad aumenta con la calidad de sueño, si el cerebro está descansado y contamos con una producción de hormona que está equilibrada, la memoria funciona a la perfección por lo que hace que la imaginación se intensifique y nos volvamos en seres más creativos. Otro beneficio importante que aporta el descanso es que, reduce la depresión. Cuando estamos dormidos el cuerpo produce melatonina y serotonina. Estas hormonas contrarrestan los efectos de las hormonas del estrés por lo que nos ayudan a ser más fuertes emocionalmente y más felices.
Para intentar combatir el estrés y las pocas horas de sueño te hemos traído algunos productos que facilitan la relajación y por lo tanto el descanso.
Pastillas naturales de melatonina
Una forma natural de ayudar a conciliar el sueño sin recurrir a fármacos agresivos. Esto puede incrementar considerablemente tu calidad de sueño ya que te facilitará la relajación corporal y será más fácil para tu cuerpo alcanzar el sueño profundo.
Aceite para relajar el cuerpo antes de entrar en la cama
Los aceites pueden ayudarte a generar neurotransmisores que benefician la concentración, la relajación y aumenta la sensación de paz. También puedes incorporar un gel de ducha que contenga propiedades relajantes.
Ejercicios de relajación
Los ejercicios y la rutina que creamos antes de dormir es sumamente importante para garantizar una buena calidad de sueño. Te dejamos un vídeo corto para que puedas incorporar esta técnica a tu rutina.