El cantante y actor David Bustamante se ha estrenado como protagonista del musical Ghost, basado en la exitosa película de 1990 que protagonizaron Patrick Swayze, Demi Moore y Whoopi Goldberg. El artista cántabro interpreta a Sam, un ejecutivo que muere en un atraco y queda atrapado entre el mundo de los vivos y el de los muertos para proteger a su novia Molly, interpretada por Ana Dachs.
Ghost, el musical se reestrenó el pasado 21 de abril en Madrid, tras una gira por toda España. El espectáculo cuenta con una producción original dirigida por Federico Bellone, director artístico de reconocidos musicales como Mary Poppins, Dirty Dancing o Charlie y la fábrica de chocolate. Bustamante comparte el papel de Sam con Ricky Merino y Christian Sánchez, que se alternan en las funciones. El cantante ha expresado su ilusión por este nuevo reto profesional.
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En Hoy Magazine, hemos tenido la oportunidad de hablar con él y preguntarle por otros temas como Operación Triunfo o Eurovisión. Al ser preguntado por su opinión acerca de Blanca Paloma de cara a esta edición del festival, Bustamante contestó: «Uno nunca sabe que es lo que va a funcionar en Europa. Yo creo que es una representante muy buena. Es una artista que lo lleva peleando ya desde otras ediciones. Tiene una muy buena canción y siempre voy a apoyar a lo que llevemos». De igual manera, quiso dedicar unas palabras en tono de humor tras responder a la pregunta. «Yo voy con España, con Eurovisión y con el Real Madrid», eran las palabras con las que nos dejaba claro que apoyaría a Blanca Paloma en esta edición.
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También tuvo tiempo para hablar la vuelta de Operación Triunfo. Desde un primer momento, ha tenido buenas palabras hacia el programa, y según ha dicho, «la gente que hace el programa es un amor. Se merecen que el programa siga con este formato que lucharon tanto por crear». Comentó que sería una gran presión participar en este programa como jurado en el hipotético caso de que se lo propusieran. Además bromeó con esta situación argumentando «yo creo que no me cogen porque soy demasiado bueno».