Carlos Sadness habla de ella en sus canciones. Todos los influencers que tienen allí su piso, no paran de decir lo maravillosa que es. Y hemos de darle la razón. Barcelona es un «ni contigo ni sin ti» que se te crea en el estómago la primera vez que la pisas. Ya sea en forma de visita a tus familiares o amigos. Ya sea por curiosidad y turismo cercano. Ya sea porque sí, todos quieren ir… Y algunos hasta volver.
Podríamos preguntarnos qué hacer por esta ciudad en estos días; y no puede venir a la imaginación nada mejor que una azotea o sky bar. Disfrutar de una bebida en algunos lugares como Barceló Raval o La Terrazza Negresco Princess mientras agradeces las vistas desde arriba. Ir antes del anochecer para aprovechar el atardecer sería muy buena idea.
Los paseos por la playa, sin olvidar la sudadera. Hemos llegado a la época favorita de muchas personas que no pueden lidiar con el sol; la de caminar por la playa con los pies descalzos y usar una sudadera ancha. Lo bueno de esta ciudad ya no es la belleza artística y urbanista que guarda, sino la costa. Una ciudad costera, donde puedas escapar al mar en un mal día es el sueño de muchos al salir de la oficina.
Además de una gastronomía muy rica, los restaurantes brillan como estrellas y estrellas Michelín. Como es el caso de Hoy Shunka, uno japonés. Los amantes de sushi se extienden como la pólvora y hemos oído en diversas ocasiones que en Barcelona se consume mucho más que en otras ciudades dado el gran interés cultural de las personas. Este restaurante posee una de las mejores críticas. Así que si te gusta el sushi y quieres probar en un verdadero japonés, reserva para no quedarte sin mesa.
¿Y si lo que quieres es dejarte seducir por la naturaleza? Puedes hacer un tour por los Jardines Secretos de Barcelona y descubrir estos pequeños rincones que son una maravilla y desconectar de lo urbano por una tarde o mañana. El Jardín Botánico Histórico y Jardines del Palau de les Heures entrarían también en estas opciones. Además, ni siquiera haría falta nombrarlo: las obras artísticas arquitectónicas de Gaudí y dejar volar la imaginación y los ojos mientras apreciamos los mil colores que constituyen sus famosas obras.
Si queréis una buena e inolvidable comida por esta luminosa ciudad, apuntad en vuestros teléfonos: Agut y Lasarte. Son dos restaurantes con la mejor crítica por expertos gastronómicos y las experiencias son muy bizarras. En Agut puedes comer alimentos bien cocinados y frescos además de estar rodeado de pinturas de artistas catalanes del siglo XX. Se conserva bastante bien y es como estar en la antigua Barcelona. Lasarte es todo un lujo, un restaurante famoso en España con tres Estrellas Michelín y el chef jugará con la creatividad de su firma.
En Barcelona basta poco para disfrutar. Un simple paseo y un café en el centro ya harán de este tu viaje inolvidable por su cercanía y magia sin haber salido del país. Si ya vives allí, siempre puedes usar un domingo para jugar a ser turista en tu propia ciudad, porque siempre hay algo nuevo y además, septiembre levanta más su belleza.
