ANA LÓPEZ| 9 Octubre.
La colección presentada por la firma italiana Dolce & Gabbana durante Milan Fashion Week ha dado la vuelta al mundo dejando a más de un espectador perplejo. La modelo Maja Salamon abría el desfile con un vestido en amarillo pastel que nos daba todas las premisas de lo que iba a ser la esperada colección de los diseñadores italianos. Múltiples bordados y coloridos detalles daban forma a la frase “Italia is love”, nombre de la colección, y a famosos monumentos de la región Italiana.
Así, como si de un anuncio publicitario se tratase, el resto de la colección incluyó imágenes de otras famosas localizaciones italianas. Desde el Coliseo, el cual aparece en uno de los corpiños, hasta la emblemática Torre de Pizza que la pudimos ver en uno de los bajos de una naranja y abotonada falda, entre flores y el David de Miguel Ángel. Con una mezcla artística como esta, el resultado no podía ser otro.
Eso sí, la gran sorpresa de la noche fueron los famosos selfies. Sí, habéis leído bien. Y es que aunque estos se han ganado un hueco en cada fiesta y evento, no nos imaginábamos que un día llegarían a la pasarela. Fundas repletas de hojas de parra, flores y fruta al puro estilo italiano adornaban los móviles que complementaban los looks de las modelos, ganándose así un hueco en la industria de la alta costura y haciendo que el espectador formase parte, de alguna forma, de la colección.
En cada creación pudimos ver imágenes de postales de 1950 con los nombres de ciudades como: Firenze! Capri! Amalfi! Taormina! Rome! Portofino! A pesar de la dulzura y alegría que transmitían los diseños, la clásica línea de la firma D&G se mantuvo. Así, apreciamos el “beauty look” que durante tantos años ha caracterizado a la marca: el estilo femme fatale de la clásica Italia. Recogidos casuales, coloridos pañuelos, labios rojos y diademas adornadas con frutas conferían el toque siciliano que durante tantos años ha inspirado a la firma y en especial a Domenico Dolce.
La colección está compuesta no solo por colores y el estilo italiano mencionado anteriormente, sino que en ella también podemos apreciar la influencia barroca y renacentista con la inserción de cristales, de todos los colores y tamaños, en los materiales acolchonados y por supuesto, en la pomposidad.
Dolce & Gabbana que se han mostrado bastante orgullosos con los resultados, han declarado que esta colección ha marcado un antes y un después en la historia de la firma. Y es que han pasado de ser diseñadores, a contar la historia de un pueblo, de una cultura.
Fuente: Milan Fashion Week