No es oro todo lo que reluce. Aparentemente la vida de los famosos vista desde fuera parece estar plagada de lujos, excentricidades y felicidad. Todo parece perfecto, todo parece funcionar. Pero a veces cuando ocurre algo malo, se intenta ocultar. Tal vez por miedo o por temor de la reacción de sus seguidores. O simplemente a veces, no se es consciente de que algo está fuera de lugar, que hay cosas que no deberían funcionar así.
Este es el caso de una de las cantantes más famosa a nivel mundial. Taylor Swift fue acosada sexualmente por el locutor y DJ David Mueller que le agarró la nalga durante toda una sesión de fotos.
Los hechos ocurrieron en 2013 antes de un concierto de la artista en Denver. «Definitivamente, fue un manoseo muy largo. Fue algo intencionado, se quedó agarrado a mi nalga. Noté como me agarraba por debajo la falda» declaró la cantante durante su declaración en el juzgado.
Taylor Swift, que finalmente acabó ganando el juicio, pidió una simbólica compensación económica de un dólar, mientras que el acusado, que también la denunció, reclamó tres millones de dólares por daños y prejuicios.
Y es que, la artista decidió llevar a cabo este proceso judicial para poder servir de ejemplo para el resto de mujeres que «pueden resistirse a revivir públicamente actos igual de humillantes e indignantes».
«Definitivamente, fue un manoseo muy largo. Fue algo intencionado, se quedó agarrado a mi nalga. Noté como me agarraba por debajo la falda»
Otro de los casos de agresión sexual fue el de Kesha. La cantante demandó en 2014 a su productor Gottwald por haberla drogado, violado y abusado emocionalmente de ella. Por ello, exigía terminar su contrato de grabación con él y su empresa, vinculada con la disquera Sony.
Desde entonces, el proceso judicial se alargó hasta 2017 y varios jueces negaron a la cantante acabar con su contrato con la disquera. E incluso, numerosas artistas como Taylor Swift donaron a la cantante miles de dólares para poder afrontar los gastos judiciales.
Finalmente, la resolución del juicio dio la razón a su antiguo manager por falta de pruebas que demostrasen el abuso por su parte. Además, la cantante está forzada a grabar dos discos más con Sony debido al obligado cumplimiento de su contrato firmado años atrás.
Sin ir más lejos, una de las artistas acosadas fue la niña prodigio de la sociedad española de los sesenta, Marisol. Ya desde su niñez sufría todo tipo de abusos. A los ocho años, cuando se fue a una gira por todo el mundo con “Los Joselitos del cante”, fue duramente maltratada por la querida de uno de los empresarios.
Su mánager Manuel Goyanes hizo de ella un objeto de consumo. “Yo estaba como secuestrada. Cuando ya siendo mayor quería conocer chicos me lo prohibían. Y si de los que conocía me gustaba alguno, me lo aislaban inmediatamente. Yo era intocable, ¿entiendes?, era su negocio” declaraba la artista para una entrevista de la revista Interviú.
Algunos años más tarde durante una sesión de fotos, el fotógrafo, amigo de Goyanes, la desnudó y la comenzó a meter mano por todo el cuerpo. Tiempo después descubrió una colección secreta en la casa del fotógrafo de imágenes de niñas desnudas que había fotografiado.
«Su mánager Manuel Goyanes hizo de ella un objeto de consumo. “Yo estaba como secuestrada. Cuando ya siendo mayor quería conocer chicos me lo prohibían»
Pamela Anderson también fue otra de las artistas que sufrieron este tipo de agresiones. Durante el festival de Cannes de 2014 confesó que cuando tenía seis años, su niñera abusó de ella en varias ocasiones. Más tarde, también declaró, que uno de los amigos de su hermano la violó cuando tan solo tenía 12 años. «Él tenía 25 años y yo 12. Decidió que me enseñaría a jugar al backgammon, lo que acabó en un masaje en la espalda, que condujo a una violación. Pensó que sería divertido violarme junto a seis amigos más”.
Por último, aunque esta lista se podría alargar mucho más, tenemos a Charlize Theron. Sufriendo constantes abusos por parte de su padre desde su infancia, actualmente es uno de los principales apoyos de aquellas mujeres que han sufrido violaciones en su país y en el resto del mundo. Trabaja con las víctimas para su recuperación física y psicológica. Les da la ayuda que en su momento nadie le brindó.
Estas son tan solo algunas de las miles de personas que sufren o han sufrido en algún momento de su vida alguna agresión sexual. Aprendamos de su ejemplo, valentía y fortaleza.