Una de nuestras divas favoritas ha cumplido el pasado 28 de marzo, 31 años. Y esa es la encantadora y excéntrica Lady Gaga. Su verdadero nombre es Stefani Joanne Angelina Germanotta nacida en Nueva York, y se dio a conocer en el panorama artístico en 2008 con su álbum The Fame, en el que bailamos sus éxitos de Just Dance o Poker Face. Desde su primera aparición hasta hoy, Lady Gaga ha cambiado, y mucho. Veamos su evolución…
En 2008, empieza su andadura musical a nivel mundial. Ella era la reina de las pelucas rubias platino, las gafas inundando su rostro y plataformas infinitas. Hasta el 2010, Gaga dio rienda suelta a su imaginación y cada alfombra roja ha vestido un modelito imposible con el que descolocar al mundo entero. La hemos visto con trajes tan polémicos como el diseño de encaje del año 2009 para los premios MTV, que le cubría todo el cuerpo, incluso la cara y acababa en una gran corona puntiaguda; o el compuesto de carne cruda con el que se presentó en los de 2010. Toda una colección durante estos años de extravagancias «made in Lady Gaga».
En 2011, sorprendió a todos cuando apareció el alter ego masculino de la artista al que llamó Jo Calderone. La cantante ha sido una persona mentalmente inestable y con esta postura tenía un objetivo personal: la posibilidad de poder conocer y entender el sexo opuesto después de varias citas desastrosas.
A partir de ahí comienzan los años de madurez de la cantante, con algún que otro despunte ya que el espíritu Gaga siempre estará ahí. Unos años en los que Lady Gaga ha deslumbrado en cada alfombra roja y en cada actuación por la sobriedad de sus looks y la elegancia que desprende.
Recordamos el look elegido para uno de los momentos del desfile de Victoria´s Secret, de la firma española Yolancris, transparente y con rosas bordadas o la gala de los Oscars con un diseño en blanco de Versace. Pura elegancia.
Resumen de cada año, foto a foto.
2017: Una Lady Gaga más humana, más natural.