Javi Moralejo| 14 de Septiembre, Santiago de Compostela
Los Minions, esos adorables y algo patosos seres amarillos, han arrasado por todo el mundo con sus ojos saltones, su adoración por las bananas y su ininteligible lenguaje.
En el 2010 hacían su primera aparición como secundarios en “Gru, mi villano favorito”, film en el que ya nos conquistaron con sus astucias y su entrañable aspecto. Nos acabaron ganando en la segunda entrega de “Gru” en el año 2013, hasta llegar a convertirse en los auténticos protagonistas este 2015 con el estreno de “Los Minions”.
“Los Minions” es la precuela de la saga “Gru” y nos relata la alocada historia de estos pequeños seres y su constante búsqueda del ser más malvado de la Tierra para convertirlo en su amo, desde el origen de la vida hasta Gru, su villano favorito. La película arrasó en la taquilla americana convirtiéndose en el segundo mejor estreno de una película animada por detrás de “Shrek tercero” con una recaudación de 115 millones de dólares en su primera semana en cartelera. Actualmente el film ha superado los 1.000 millones de dólares a nivel mundial convirtiéndose en la tercera película de animación más taquillera de la historia, por detrás de “Frozen” y “Toy Story 3”.
Pero además de un éxito cinematográfico los Minions se han convertido en todo un fenómeno fan. Y es que estos pequeños esbirros han desatado una auténtica fiebre amarilla convirtiéndose en todo un producto a través de una extensa red de merchandising. Podemos encontrar en el mercado todo tipo de artículos caracterizados por los estos, desde mochilas, pijamas, camisetas, gorras… todo un negocio para Universal que ha creado un universo alrededor de los Minions. Así mismo han aprovechado dicho tirón multinacionales de la talla de McDonals, que regalaba figuras de estos en sus populares “Happy Meal”; Cola- Cao que incluía en sus cajas zapatillas, tazas o incluso una batidora inspirada en estos simpáticos seres animados; o la marca de supermercados Carrefour que también ha sucumbido en su última campaña de ventas al gancho que estos tienen entre los consumidores.
El mundo de los famosos y la moda no se quedan atrás y también se han contagiado de la fiebre amarilla. El exfutbolista David Beckham se tatuaba un Minion en honor a su hija mientras que Sandra Bullock participó en el diseño de unos zapatos inspirados en las pequeñas estrellas amarillas. La revista Vogue Uk los convertía en protagonistas de su portada del mes de junio.
No cabe duda, por tanto, del éxito indiscutible y del tirón comercial con el que cuentan los Minions, que hasta cuentan con una cumbia compuesta por el comediante chileno Rogelio Rojas, en su honor.