El público, minutos antes de ver a la cantante, ya coreaba “Sí, sí, sí, Pantoja ya está aquí”. Y como si de una diosa romana se tratase, Isabel Pantoja, ‘la tonadillera’, apareció ante un abarrotado Teatro Romano de Mérida que estaba entregado desde antes de comenzar el show. Con una toga de seda color coral y un vestido de manga larga del mismo color, adornado con brillos y destellos plateados, su sola presencia llenaba la escena de lo que ella denominó “este maravilloso y espectacular teatro, con tanta historia y que de verdad es puro arte”.
‘Embruja por tu querer’ fue el tema escogido para comenzar el espectáculo y con el que además se inauguraba esta novena edición del STONE & MUSIC Festival. La cantante Isabel Pantoja fue recibida con claveles rojos y blancos desde el graderío, en Mérida.
“Llevo 48 horas aquí, en esta maravillosa ciudad, donde siempre me han acogido con cariño”, decía la artista, que derrochó su poderío sobrenatural de principio a fin, con temas como ‘Ten compasión de mí’, ‘Fue por tu voz’ y ‘Yo quiero pecar contigo’. Recorrió con destreza y soltura el escenario de punta a punta, acompañada por más de medio centenar de músicos entre orquesta y coro.
Tras hacer un breve repaso por algunas de sus sevillanas, con total naturalidad se refirió al calor -“hace mucha caló”- y tras un par de temas más, se quitó la toga para quedarse con el brillante vestido largo que además recogía por momentos para bailar con mayor comodidad.
Llegó el turno de ‘Caballo de rejoneo’, ‘Pobre mi esperanza’, ‘Veneno’ y la sorpresa de la noche, ‘Garlochi’, acompañada de Soraya, “una artista guapísima, encantadora y encima extremeña”, como explicó ‘la tonadillera’, que pidió para ella un fortísimo aplauso del público. Soraya, como siempre, no defraudó. Con un elegante pantalón negro, camisa blanca, chaquetilla negra de lunares del mismo color pero de otro tejido, la de Valencia de Alcántara mostró en el escenario que es una enorme profesional y nos regaló su impresionante vozarrón, acompañado del baile ya viral de este tema, para el que pidieron la presencia de Anabel Pantoja, sobrina de Isabel e impulsora de esa coreografía. Las tres estuvieron espléndidas en el escenario y tras este momento llegaba el último tramo del concierto. Además, Soraya obsequió a la cantante con unos llamativos pendientes extremeños «de calabaza».
Lo más fuerte lo dejó para el final. Otro de los momentos grandes del espectáculo llegó con ‘Virgen del Rocío’, cuando la iluminación del emblemático monumento romano lució de manera impresionante. Además, la cantante pidió al público que la acompañase sacando sus móviles. Fue tras finalizar este tema cuando presentó al director de la orquesta, Victor Eloy, para anunciar que llegaba uno de los temas más esperados: ‘Marinero de luces’. Su voz, su fuerza y grandeza en el escenario lo llenaron todo.
El público de Isabel Pantoja en Mérida, extasiado de felicidad, disfrutó entre tema y tema hasta llegar a ‘Se me enamora el alma’ y ‘Enamórate’, con el que puso el broche de oro a un concierto que duró más de dos horas y media y que será difícil de olvidar.
