Estamos acostumbrados a que cuando llegan estas fechas los cines y la pequeña pantalla se llenen de películas navideñas. Todas ellas impregnadas del espíritu navideño con carácter alegre y festivo y cuyo principal protagonista es Santa Claus el héroe navideño de niños y adultos por excelencia. Este año irrumpe en nuestros hogares ‘Krampus’ y con este el género de terror dentro de las alternativas cinematográficas para estas fechas para competir con los ideales navideños que Disney nos inculca año tras año.
Pero, ¿quién es Krampus? Krampus es un ser mitológico con aspecto demoniaco originario de los países alpinos. Podría ser algo como “el hombre del saco”, pues este castiga a los niños que han sido malos y se los lleva en su saco.
‘Krampus: el terror de la Navidad’ se centra en este personaje. Max es un preadolescente que carece de espíritu navideño. Durante un viaje con sus padres, este se enfrentará a lo inimaginable cuando la criatura Krampus cobre vida junto a sus malévolos secuaces (tétricos muñecos de porcelana y jengibre entre otros). La aparición de este ser, se suma a un apagón navideño y la presencia de los irritantes familiares de Max, entre ellos sus insoportables tíos y sus abuelos. Este se ve obligado a permanecer encerrado en casa con ellos ante el posible ataque de Krampus.
El film podría categorizarse como una película de “serie B” llena de gags y momentos cómicos que incitan a la risa más que al terror. La sangre y los sustos se entremezclan entre las luces navideñas y el tono satírico de esta película dirigida por Michael Dougherty. Pese a ello aspira a ser una de las cintas más seguidas en estas navidades. Quizás la innovación radique en recuperar esta vieja leyenda y transmitirla ahora a través de la gran pantalla sin unos increíbles efectos especiales, pero con un elenco cuya interpretación es destacable.
Sí queréis disfrutar de una Navidad diferente y terrorífica, ‘Krampus: el terror de la Navidad’ debe de ser la principal opción para vuestros planes cinéfilos navideños. Espero que hayáis sido buenos.