Se dice que una mirada vale más que mil palabras, por eso cuando aparecen los primeros signos de la edad, esta nos delata. Ojeras, patas de gallo, párpados caídos, bolsas, son los problemas más comunes en esta zona tan delicada. Además de hidratar la piel y prevenir la aparición de arrugas la blefaroplastia, es una sencilla intervención que mantiene la mirada joven.
Hay muchas personas que con el paso de los años notan como sus párpados empiezan a perder elasticidad y a caer sobre los ojos. Esto puede ser incomodo, ya que en algunos casos llega a reducir el campo de visión, pero además añade edad a los que lo padecen. El envejecimiento peri orbicular está sobre todo asociado a factores genético, siendo frecuente la presencia de familiares con el mismo problema. La blefaroplastia es una cirugía que busca rejuvenecer los párpados, devolviéndoles la firmeza sin que la persona pierda sus rasgos naturales.
La blefaroplastia sin cirugía es una técnica que consiste en eliminar el exceso de párpado y arrugas del contorno periocular. Con ello logramos dar una mayor apertura al ojo y, de este modo, alegramos la mirada. Es una técnica que resulta muy ventajosa, ya que los resultados son muy similares a los que se obtienen con una cirugía, pero sin tener que pasar por el quirófano o por un periodo de recuperación más prolongado.
¿Cómo se realiza el tratamiento?
La tecnología plasma es un dispositivo que influye en la estructura de la piel sobre la que actúa, produciendo una contracción directa e inmediata de la zona con la sublimación tisular. Se realiza un dibujo de la zona a contraer, haciendo puntos de acercamiento del láser, para producir la lesión del tejido. Éstos serán tan próximos como sea el grado de flacidez de la piel, y se llevarán a cabo hasta cubrir toda la extensión de la zona a tratar.
Recomendaciones sobre el cuidado de la mirada
Tras la blefaroplastica sin cirugía es importante tener en cuenta varios cuidados que nos ayudarán a descansar nuestra mirada y hacerla brillar mucho más de lo que lo hacen día a día. De hecho, se deberá tener en cuenta antes de dicha cirugía, por ejemplo, no se deberá tomar el sol una semana antes de la realización del tratamiento, ni cuatro semanas después de haberse sometido a ello. Se recomienda usar crema con un alto índice de protección solar durante los tres primeros meses para que las zonas más sensibles no sufran daños por la exposición solar. En el caso de que aparezcan costras tras el tratamiento, se deberá lavar con agua y jabón neutro dos veces al día para mantener limpia la zona afectada y, de igual manera, mantener hidratada la zona con vaselina, una vez, que las costras hayan desaparecido. No olvides, acudir a tu médico especialista para una revisión periódica y controlar que todo está correcto
¿Dónde poder realizarla si vives en España?
En España, este tratamiento es más común de lo que creemos y muchas clínicas están trabajando diferentes procesos para que la mirada vuelva ha ser el espejo del alma y refleje lo que todos queremos transmitir.
Si vives en Madrid, podrás encontrar este tipo de tratamiento en Clínicas Nordetia o si estas en Barcelona en Clinica Sanza. Consulta a tu médico estético tu problema y rejuvenece tu mirada.