Rubén Pareja Ramírez| Málaga. 20 Septiembre.
Telecinco emitió el pasado miércoles la segunda temporada de ByB, la serie protagonizada por Belén Rueda y Gonzalo de Castro, que se despidió de la parrilla en junio del año pasado y cuya trama consiste en la discordia entre Candela (Belén Rueda) y su ex novio, Pablo (Gonzalo de Castro), a quien nombran nuevo director de la revista en la que ella trabaja. A ésta, por su parte, no le resulta muy agradable volver a ver a Pablo tras su ruptura con él hace varios años.
Tras pasar más de un año desde su ausencia en la parrilla, es digno de debatir si la serie dirigida por Daniel Écija tendrá el mismo éxito que su anterior temporada, o aún peor, si ésta vez no se cancelará antes de lo previsto. En su estreno del miércoles 16, ByB quedó en un pobre cuarto puesto, en una noche liderada por la entrevista de Bertín Osborne a Jesulín de Ubrique (La 1) y por el Hormiguero (A3). Frente a los casi 2,8 millones de espectadores que el torero dio a la pública, ByB sólo consiguió 2,2 millones, aunque, eso sí, logró superar a Top Chef, el plato fuerte del prime time de Antena 3 y al avance de Gran Hermano.
Este voto de confianza por parte de la cadena líder de Mediaset se podría interpretar de varias formas. Una de ellas podría ser, sin duda, la necesidad de hacer lo que comúnmente se llama «rellenar un agujero vacío» en la parrilla, aunque también pudieron confiar en que la serie remontase. Pero, tras sus flojos resultados del pasado año más el tiempo que ha transcurrido entre las dos temporadas, el asunto ha resultado ser bien distinto.
Si el último episodio que se emitió en junio cosechó más de 2,7 millones de espectadores, con un share de 15,2%, el de la noche anterior sólo logró 2,2, con un 13,7% de cuota de pantalla, lo que demuestra que el público no estaba atento a un episodio que, además, ha traído una segunda temporada sin novedades. Será cuestión de tiempo para ver qué ocurrirá las siguientes semanas, si deciden cambiar el día de emisión o continuar los miércoles en la lucha por las audiencias, lo que posiblemente les lleve a cancelar la serie.