Una impresionante Bibiana Fernández con su perrita en brazos abrió el desfile de Andrés Sardá a su llegada al Hotel Rève de Nuit. Cuando un desfile empieza de esta manera sabes que todo lo que vendrá a continuación va a ser espectacular, y así fue. La firma catalana cada año pone el listón más alto y sorprende tanto con los con diseños como con la puesta en escena.
La firma creó el hotel Rêve de Nuit para hacernos soñar con un rincón en el que vestirse con lencería es más que suficiente, y así, sujetadores joya, bodies lenceros, coulottes altas, a la cintura, corsés entallados en blanco, negro, oro y plata con toques de rojo, óxido, berenjena, cacao, suaves tonos maquillaje y azul profundo se fueron sucediendo por la pasarela ante la atenta mirada de los allí presentes.
Andrés Sardá pone a disposición de botones, camareras, demás personal del hotel y huéspedes lencería elaborada con organza de seda, vernis, raso, tul y encaje de chantilly como protagonistas en texturas y tejidos. Esta es una colección llena de contrastes conseguidos combinando diferentes técnicas de bordado en paillettes con tejidos de lúrex, metálicos, tul invisible y cristal de Swarovski.
Y como todo lo que tiene un principio tiene un final Bibiana Fernández volvió a la pasarela con su perrita en brazos de nuevo enfundada en un traje de noche de paillettes y transparencias y un maravilloso abrigo de pelo blanco que nos dejó boquiabiertos. Un magnífico fin de fiesta.
