Manuel Carrasco hoy ha flechado con su corazón al público de Barcelona en el concierto en Palau Sant Jordi, en su fin de gira Corazón y Flecha, con todas las entradas vendidas. Un espacio tan grande con un aforo de más de 17.000 personas.
Al iniciar el concierto, Carrasco salía con un arco en las manos y una flecha que lanza al aire y se prende con fuego a medida que sale disparada al público del Sant Jordi, dando calor y encendiendo sus corazones. Así arrancaba la noche.
Un Manuel Carrasco emocionado, nos ha compartido sus recuerdos de su paso por Barcelona, cuando tenía tan sólo 21 años, en la gira que lo vio crecer como artista junto a sus compañeros de OT2 allá por años años 2002-2003. Tocando temas más actuales de su último disco, a más antiguos, suenan ritmos desde el pop al flamenco más puro, sacando siempre a brillar su esencia y orígenes onubenses.
Con una mirada intensa y generosa, va hablando y cantando, mirando a su público, acercándose, sin despegarse de la pasarela más cercana a ellos, dejando detrás el escenario. Siempre buscando el contacto visual con sus seguidores, mirándolos a la cara durante todo el concierto. Un Manuel enérgico des del minuto uno, bailando, saltando, dándole a las palmas, sonriendo, agradeciendo...quedando lejos ya, el Manuel tímido de sus inicios.
Con ya una larga carrera musical, con temas propios, y con 9 discos a sus espaldas, sigue componiendo día tras día, siendo fiel a su faceta de compositor y músico que tanto revindicó en su primera etapa como cantante. A Manuel lo miras, y le ves la misma esencia y la misma persona noble, que no ha cambiado desde que se presentó al Talent Show OT2. Puedes verlo claramente a él, por supuesto que más maduro, más profundo y más experimentado. Pero jamás ha perdido ese brillo. Y así salía vestido hoy, lleno de brillos.
Ha cantado temas del primer disco Quiéreme (2003), y otras canciones de sus inicios con los discos Habla (2012), Confieso que he sentido (2013), Bailar el Viento (2015) y también temas más actuales cómo los de los últimos dos trabajos La Cruz del Mapa (2018) y Corazón y Flecha (2022).
A mitad de concierto ha sacado su guitarra para deleitarse con un acústico donde abría el set con la belleza del tema Agua de Jarabe de Palo y su lado más flamenquito con Tu Calorro de Estopa, No estaba muerto, Una lágrima cayó en la arena, Alegría de vivir y Sarandonga, entre otros. Llegaba su momento más sensible con el tema no Dejes de soñar y sus solos al piano con canciones cómo Soy afortunado, Que nadie y Mujer de Mil Batallas, apoyando las causas benéficas.
Cerraba el concierto enérgico y pletórico, con temas más rítmicos, haciendo saltar al público, que quedó con el corazón encendido desde que lanzó la flecha al inicio del concierto. Decía el propio Carrasco, que el concierto se le estaba pasando muy rápido (ha tocado más de 25 temas, y más de 2 horas seguidas sin parar) y reconocía él mismo, que no quería que se acabara.
Fotos y texto: Gemma Olivares