De nuevo María Escoté acapara todas las miradas durante la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid. Esta vez, la diseñadora ha unido fuerzas con Wallapop, la principal plataforma de compraventa de productos de segunda mano, presentando la colección como Wallapop x MaríaEscote, la primera propuesta elaborada enteramente a partir de prendas de segunda mano. La importancia de la reutilización en la industria de la moda y la necesidad de reducir su impacto también han estado así presentes en una MBFWMadrid más comprometida con el planeta.
La diseñadora ha unido fuerzas con Wallapop, presentando la primera propuesta elaborada enteramente a partir de prendas de segunda mano.
Los 23 looks que forman parte de la propuesta se han presentado en un sala Bertha Benz repleta de personalidades del mundo de la moda, ante los cuales la diseñadora ha tenido la ocasión de probar que estilo total, reciclaje y responsabilidad para con el medio ambiente no tienen por qué estar necesariamente reñidos. María ha creado, a partir de lo que otros ya no querían, una colección verdaderamente exclusiva cargada de creatividad y textiles en prendas con historia propia que contar y auténtica personalidad. La diseñadora ha jugado a deconstruir prendas de lo más dispares. De chaquetas a de moto a chándales vintage, ninguna prenda se resiste a a su tijera y su talento reinventivo.
La plataforma Wallapop cuenta en su plataforma con apartados específicos para todas las categorías de bienes de consumo, y especialmente en moda, donde existe gran variedad de productos con ciclo de circulación más ágil que el resto. Estas camisas, zapatos, bolsos… cambian de dueño y de vida en menos que canta un gallo. Este hecho supuso la principal fuente de inspiración de María Escoté como base para dar vida a una colección con el nombre de Walla Bibidi Babidi Bu!. Así, como por arte de magia, lo que podría haberse convertido en un desecho más de la industria de la moda, se convierte en un producto completamente novedoso.
Hemos encontrado sobre la pasarela una colección única que permite explorar una gran diversidad de estilos dejando un poco atrás la «dictadura» de las tendencias. Y es que Escoté propone, fiel a su estilo, gran variedad de estilismos. Desde el típico conjunto en denim, aderezada con el nombre de la marca acorde con su característica logomanía, a conjuntos más complejos y arriesgados, como el vestido de novia final combinado con un velo en puntilla vintage color lila. Las aplicaciones y motivos multicolores también están presentes, y la accesorización imprime carácter al conjunto acorde con la estética de la diseñadora. Globalmente, apreciamos una colección de dinámica diferente a lo que estamos acostumbrados. Una interesante iniciativa que quizá podría extenderse en la industria en un futuro.