Natalia Osona es una de las influencers más populares de España, con
más de un millón de seguidores en instagram y una exitosa marca de ropa llamada
Glowrias. Sin embargo,
su reputación se ha visto afectada por una polémica que ha indignado a muchos de sus fans.
Hace unos días, la madrileña de 32 años anunció en su perfil de Instagram que
sorteaba dos entradas para ver a Coldplay en Barcelona, uno de los conciertos más esperados del año. Para participar, solo había que seguir su cuenta y etiquetar a dos amigos en la publicación.
La iniciativa tuvo una gran acogida y miles de personas se apuntaron al sorteo, esperando tener la oportunidad de disfrutar de la música de la banda británica. Sin embargo, a las pocas horas de publicar la foto, Natalia la borró sin dar ninguna explicación.
Según las normativas vigentes, está prohibido legalmente la reventa o sorteo de entradas para espectáculos públicos, ya que se considera una actividad fraudulenta que perjudica a los organizadores y a los consumidores. Natalia debía saber esto, ya que estudió Derecho en universidades tan prestigiosas como Harvard.
Al borrar la publicación, Natalia dejó en el aire el destino de las entradas y el resultado del sorteo, generando una gran decepción y enfado entre sus seguidores, que se sintieron engañados y estafados. Muchos le reclamaron una explicación y una disculpa.
Además, algunos usuarios acusaron a Natalia de haber usado el sorteo como una estrategia para ganar más seguidores en su cuenta de Instagram, ya que era uno de los requisitos para participar. De esta forma, habría obtenido un beneficio personal a costa de ilusionar a sus fans con un premio falso.
Natalia ha sido muy criticada por su actuación, que ha dañado su imagen como influencer y como persona. Algunos medios de comunicación se han hecho eco de la polémica y han cuestionado su credibilidad y su ética profesional.